Los trapos sucios de Donald Trump podrían ver la luz después de que un grupo de hackers, denominados REvil, consiguieran colarse en el sistema informático del despacho de Allen Grubman, un bufete de abogados con clientes tan reconocidos como Madonna, Lady Gaga, Elton John o Robert de Niro, y robaran hasta 756 gigabytes de datos confidenciales.
Los hackers chantajearon a los famosos afectados pidiendo 21 millones de dólares por no divulgar todos sus secretos. Sin embargo, en las últimas horas han doblado la cantidad, amenazando al mismísimo presidente de Estados Unidos. Los piratas informáticos han exigido 42 millones de dólares (38,8 de euros) o publicarán "una tonelada de ropa sucia" del magnate americano.
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Por el momento y para demostrar que van en serio, han filtrado emails de Trump como protagonista de distintos contratos, así como datos relativos a Madonna y Lady Gaga. Los deportistas LeBron James y Mike Tyson; la actriz Priyanka Chopra; los cantantes Drake, Barry Manilow, Rod Stewart, y Lil Nas X; y los integrantes de los grupos The Weeknd y U2, son otros de los afectados por este hackeo.
La inclusión del presidente entre los famosos cuyos secretos pueden salir a la luz ha redoblado los esfuerzos del FBI para localizar a los hackers. También ha provocado que el Servicio Secreto, que protege la seguridad de Trump, se una a la investigación.
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