Uno de los sectores que se está viendo gravemente perjudicado por las consecuencias económicas que deja el coronavirus es el mundo de la cultura. Empresas como Live Nation, que se encarga de realizar conciertos y eventos deportivos en todo el mundo, es una de las afectadas y tras su caída en bolsa el gobierno de Arabia Saudita, encabezado por el rey Salmán bin Abdulaziz, ha adquirido una participación del 5'7%.

Esto supone nada más y nada menos que un desembolso de 500 millones de dólares de las arcas públicas del país. Esta participación incluye 12.337.569 acciones, convirtiéndose el Fondo de Inversión Pública de Arabia Saudita en el tercer mayor accionista de la compañía de espectáculos en vivos. El mayor accionista individual sigue siendo Liberty Media con una participación del 33%.

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Durante estas semanas en las que el mundo entero está paralizado como consecuencia de la pandemia, la compañía de espectáculos ha protagonizado algún que otro malestar entre sus clientes. Fueron demandados tras no devolverle a sus clientes el dinero de las entradas de los eventos que habían sido suspendidos. No obstante, a raíz de esta polémica la empresa modificó su política interna.

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No es la única inversión que el Gobierno saudita ha realizado en estos tiempos convulsos por el azote del Covid-19. En este mes también adquirió una participación de 775 millones de dólares en la compañía turística Carnival Cruises.

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