JK Rowling se inspiró en su propia vida para crear la maravillosa saga de libros de Harry Potter. Uno de los lugares que influyó en su obra fue la casa Church Cottage del pequeño pueblo inglés de Tutshill en la que pasó su infancia. Ahora se ha descubierto que la propia escritora compró la vivienda en 2011 por 400.000 libras, unos 458.000 euros.
La propiedad, situada en el bosque de Dean, fue el hogar de JK Rowling entre los 9 y los 18 años, mientras asistía a la cercana escuela Wyedean. Se dice que el centro de estudios y sus maestros inspiraron la Escuela de Brujería y Hechicería de Hogwarts.
La casa también tiene detalles que recuerdan a su famosa saga, ya que cuenta con un armario debajo de las escaleras que guarda ciertas similitudes con la habitación en la que se vio obligado a vivir Harry Potter con los Dursley, así como una bodega parecida a la que custodiada el perro de tres cabezas Fluffy en Hogwarts.
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La propiedad de J.K. Rowling también contiene una inscripción escrita en el marco de una ventana: "Joanne Rowling durmió aquí alrededor de 1982". Por ahora, se desconoce los planes que tiene la novelista para la vivienda, aunque sí se sabe que obtuvo el permiso para reconstruir el garaje e instalar ventanas abuhardilladas en la parte trasera de la casa.
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