La infanta Elena vive la cuarentena por la pandemia confinada sola. Mientras que Froilán se encuentra en Londres, donde hace unas prácticas universitarias, y Victoria Federica se autoaísla con su novio DJ (la última vez que la vimos estaba en Jaén), la hija mayor de los eméritos ve pasar las horas desde su domicilio en el centro de Madrid.
Y son muchas. Por eso, la hermana del rey Felipe VI procura mantenerse ocupada y participar en algunas de las iniciativas ciudadanas para combatir el coronavirus y agradecer a los sanitarios y otros trabajadores su enorme esfuerzo estos días. Elena no solo sale a aplaudir cada tarde a las 20 horas a su balcón sino que ha colgado una bandera de España en su ventana junto al dibujo de un arco iris.
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Y es que el arco iris se ha convertido en uno de los símbolos de esperanza en la lucha contra el COVID-19. Miles de internautas lo capturan estos días en el cielo y lo comparten en redes sociales, mientras que los niños lo pintan para mostrarlo en los balcones y hacer saber a otros niños que no están solos. En casa de Elena no hay niños pero es un pequeño detalle que ella, que estudió magisterio y trabajó en como técnico de guardería en 2003, ha pasado por alto.
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