Froilán de Marichalar Borbón vive de forma insólita en la era del coronavirus. La pandemia ya tocó de cerca a la princesa Leonor y la infanta Sofía cuando hace ya más de una semana se detectó un caso de COVID-19 en su colegio, Santa María de los Rosales.
El centro siguió abierto aunque más tarde se vio obligado a echar el cierre como todo el sistema educativo. Luego además su madre, doña Letizia, tuvo que hacerse el test después de besar en un acto institucional a la ministra Irene Montero, infectada. También Felipe VI se sometió a la prueba. Ambos dieron negativo.
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Pero si desde entonces, las hijas de Letizia permanecen en Zarzuela, donde reciben clases de forma telemática, como la mayoría de los estudiantes, su primo Felipe Juan Froilán de Marichalar corre un riesgo mayor, ya que el nieto mayor de don Juan Carlos reside en Londres desde el enero. Reino Unido no ha ordenado el cierre de empresas, oficinas o centros de enseñanza ya que el primer ministro británico, Boris Johnson, no ha decretado la obligatoriedad de recluirse. El primogénito de doña Elena de Borbón se mudó a Londres para realizar unas prácticas laborales en el marco de sus estudios en Administración de Empresas en la elitista universidad americana con sede en Madrid donde estudia.
