Su Graciosa Majestad, Isabel II, no gana para disgustos. Tras el último coletazo de rebeldía del príncipe Harry y Meghan Markle (por la palabra 'royal'), su nieta, Zara Phillips, ha protagonizado una nueva polémica. La hija de la princesa Ana y su marido, Mike Tindall, acaban de aterrizar en Reino Unido procedentes del norte de Italia, donde estuvieron esquiando, y se han negado a guardar la cuarentena recomendada por los médicos para controlar el coronavirus.
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La pareja estuvo estos días expuesta al virus que se desató en la zona y según los protocolos deberían aislarse durante unos días, hasta verificar que no son portadores de coronavirus. Ellos, sin embargo, se han negado alegando que no muestran síntomas, aunque de que los médicos han advertido que el periodo de incubación es largo y podría tardar hasta 15 días en mostrar los primeros indicios.
A pesar de que la cuarentena es una recomendación por parte de las autoridades sanitarias y no una obligación, muchos han tachado a Phillips y su marido de irresponsables, pues si finalmente fueran portadores del coronavirus estarían poniendo en riesgo a toda la familia Windsor. Y hay más: ambos han confirmado su asistencia al Día de la Commonwealth, que se celebra el 9 de marzo y al que acude toda la familia real sin excepción, incluso Harry y Meghan Markle.
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