Sí se puede, y si no que se lo digan a Irene Montero. La número 2 de Podemos ha cumplido el sueño americano en Madrid y en solo ocho años ha pasado de ser cajera y soltera a ministra y madre de familia numerosa. Eso sí, no lo ha conseguido sola. La llegada de Pablo Iglesias a la vida de Irene ha supuesto un antes y un después para esta madrileña de 31 años que ha pasado de cobrar 900 euros al mes a casi 90.000 al año.
Irene Montero comenzó a coquetear con la política a los 15 años, cuando se afilió a las Juventudes Comunistas (UJCE) y a los 23 se plantó en la Puerta del Sol como parte del movimiento 15M, también conocido como el movimiento de los indignados. Ese mismo año (2011) se licenció en Psicología y trabajó como cajera en una cadena de supermercados para contribuir en la economía familiar. Estaba soltera y vivía con sus padres, Clemente (un empleado de mudanzas), y Adoración (educadora).

Tres años después, en 2014, se unió formalmente a Podemos y lo dejó todo (una beca para estudiar en Harvard y una tesis doctoral) para dirigir el gabinete del líder, Pablo Iglesias, que entonces tenía una relación con Tania Sánchez. El roce hizo el cariño y este dio paso al amor, porque aunque no se sabe con exactitud cuándo comenzó la relación sentimental entre Pablo e Irene, en 2016 dejaron de esconderse y pasaron de sus humildes pisos familiares en el centro de Madrid a un chalé en Rivas.

De la crisis al chalé de Galapagar
Los inicios no fueron fáciles: un año después de comenzar su convivencia, Pablo e Irene decidieron darse un tiempo. Él se quedó en el chalé (y con el corazón roto, según publicaron algunos medios) mientras que ella alquiló un piso en Lavapiés. Meses después se reconciliaron y, desde entonces, son imparables.

En solo dos años, Pablo e Irene han puesto patas arriba su vida. A nivel personal, decidieron formar una familia y se convirtieron en padres de unos niños mellizos, Leo y Manuel. Un año después vino al mundo Aitana, la niña de la casa. Los tres churumbeles corretean por los preciosos jardines de un chalet en Galapagar que a punto estuvo de costarle a sus padres el puesto como número uno y dos del partido morado.
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Lo compraron en 2018 y tiene una hipoteca de 540.000 euros, a pagar entre ambos en un plazo de 30 años con una cuota de 1.600 euros mensuales. La casa tiene 268 metros cuadrados, con cuatro habitaciones, tres baños, de estilo rústico en piedra y madera, con 2.000 metros de terreno y casa de invitados independiente, jardín y piscina. La adquisición levantó ampollas dentro y fuera del partido y para justificarla Pablo e Irene mostraron ahorros, herencias y préstamos varios.


Dos ministerios y un hito histórico
Las elecciones del pasado 10 de noviembre obligaron a Pedro Sánchez a conformar un gobierno de coalición que ha brindado a Pablo e Irene su gran oportunidad laboral. Él ha sido nombrado vicepresidente segundo y ministro de Derechos Sociales; ella ministra de Igualdad. Ambos han jurado su cargo este lunes y han hecho historia al convertirse en la primera pareja sentimental en liderar simultáneamente dos carteras ministeriales.

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