Svante Thunberg, padre de Greta, ha revelado nuevos detalles sobre su hija, Greta, convertida en un fenómeno mediático por su lucha para sensibilizar al mundo sobre el calentamiento climático.
Al principio, según ha declarado a la BBC, pensó que no era una buena idea que su hija estuviera al frente del movimiento contra el cambio climático. Desde entonces la vida de la pequeña ha cambiado tanto como la del resto de su familia. Sin embargo el afán de lucha le ha ayudado ha superar la depresión que padecía, aunque haya tenido que pagar el alto precio de convertirse en una persona reconocida en todo el mundo.
Svante Thunberg, un actor de 50 años convertido en productor, explicó que antes de iniciar su activismo, su hija había estado sufriendo una depresión que se había prolongado durante cuatro años. "Dejó de hablar, dejó de ir a la escuela", recordó. Y agregó que "la peor pesadilla para un padre" se materializó cuando Greta comenzó a dejar de comer.
Para tratar de ayudarla, dijo, tanto él como su esposa Malena, cantante de ópera y ex participante de Eurovision, comenzaron a pasar más tiempo con ella. La decisión estuvo combinada con una mayor conciencia ecológica, lo que desató el interés de la familia por evitar el cambio climático.
Svante Thunberg se hizo vegano y Malena dejó de volar en avión, algo que "trastocó toda su carrera"."Hice todas estas cosas. Sabía que eran las cosas correctas, pero no lo hice para salvar al planeta., sino para salvar a mi hija", contó el padre. Al hacerlo, explicó, vio cómo "ella creció y cuánta energía sacó de ello".
El productor también explicó que le preocupaban a los comentarios negativos que su hija recibe debido a su exposición. Pero aseguró que su hija "lidia increíblemente bien con ellos". "Francamente no sé como lo hace, pero la mayoría del tiempo se ríe. Lo encuentra hilarante", dijo.
A los 12 años, a Thunberg se le diagnosticó síndrome de Asperger, un trastorno del espectro autista. "Mi cerebro funciona un poco diferente, así que veo el mundo desde otra perspectiva", explicó Thunberg a la AFP. "Soy muy directa, digo las cosas como son y cuando decido hacer algo, lo hago sin dudar", añadió, considerando que su diagnóstico es una fortaleza. La activista terminó la educación secundaria obligatoria en junio y tuvo que seguir sus estudios desde el extranjero debido a sus numerosos viajes.
El movimiento iniciado por Thunberg en agosto de 2018, llamado "Fridays For Future" ("Viernes por el Futuro"), se ha expandido todos los continentes, y miles de jóvenes activistas celebraron sus propias protestas. Thunberg ha dado discursos ante líderes mundiales y se convirtió en la figura excluyente de los encuentros multilaterales organizados por la ONU.