Tras 'sobrevivir' a los escándalos de Urdangarin y Corinna, Zarzuela se enfrenta a un nuevo bombazo que podría hacer temblar los cimientos de la Corona. Al parecer, un gran escándalo económico podría salpicar al rey Juan Carlos y, por tanto, a su hijo Felipe, y aseguran que ambos están temblando.

Circula en determinados medios que se prepara un gran escándalo económico dirigido a deteriorar la monarquía como objetivo principal. Estaría relacionado con la presunta fortuna del emérito, un entramado de sociedades e incluso de paraísos fiscales. De conocerse, la fortuna de Juan Carlos actuaría como una bomba con efectos sobre la imagen de Felipe VI y la estabilidad de la monarquía misma, al ser doble heredero de su padre: de la corona y del dinero cuando se muera.

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De acuerdo con estas informaciones, Juan Carlos se habría hecho muy rico gracias a determinadas comisiones y también a la Bolsa y a la presunta información privilegiada del IBEX. Unos años locos en los que los testaferros y administradores económicos regios utilizaron todas las oportunidades que ofrecía la Bolsa y más aún si disponían de información privilegiada procedente del entorno del mismísimo don Juan Carlos.

La sola posibilidad de que determinada información delicada relativa a este asunto vea la luz tiene muy preocupados y nerviosos a Juan Carlos y Felipe, pues aunque los datos afectarían solo al primero, gran parte de su patrimonio pasará a manos del segundo el día que el emérito fallezca. La solución es que Felipe renuncie a la herencia. Felipe VI haría bien al renunciar ante notario, por anticipado  a lo que le corresponda del testamento de su padre. Por lo que pueda venir.

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