Iván Espinosa de los Monteros y su mujer, Rocío Monasterio, han recibido un duro varapalo por parte de la justicia. Y es que el Ayuntamiento de Madrid ha dado orden de clausurar y precintar parte del chalet de estos dos célebres rostros de Vox. La vivienda está situada en pleno barrio de Chamartín y allí residen junto a sus cuatro hijos.
Según cuenta eldiario.es, el hogar de Iván y Rocío, de cuatro plantas y 545 metros cuadrados, carece de la licencia de ocupación obligatoria para poder residir en ella y tampoco tiene la licencia de funcionamiento, necesaria para desempeñar allí actividades económicas. Así las cosas, el Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 14 de Madrid ha dado orden de precintar el sótano de la casa, donde se desempeña actividad económica, el próximo 8 de octubre a las 10 de la mañana. Espinosa de los Monteros recurrió la sentencia, pero su reclamación fue desestimada.
Contra la orden del Juzgado ya no cabe recurso y, de esta manera, se efectuará "la clausura y precinto de la actividad", que se mantendrá "mientras no se acredite estar en posesión de la preceptiva licencia".
Para tratar de arreglar la ilegalidad, Espinosa de los Monteros ha solicitado hasta en cuatro ocasiones las licencias de primera ocupación y de funcionamiento de la vivienda, pero nunca aportó la documentación necesaria, según figura en el expediente urbanístico. El pasado 22 de julio, el dirigente de Vox recibió la notificación que le anunciaba que parte de su vivienda se clausurará el en poco más de un mes.
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No es el único quebradero de cabeza que la casa les ha dado a Espinosa de los Monteros y a Monasterio. Desde que se terminó de construir en 2014 tras adquirirla en 2010 por 1,2 millones de euros, la vivienda ha estado en el ojo del huracán. Sobre todo después de que el diputado de Vox fuera condenado por eludir el pago de 63.184 euros a una de las empresas que la edificó.
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