Belén Esteban ha vuelto a Madrid tras disfrutar de un verano muy especial, recién casada y en compañía de su 'Migue', con quien ha ido desde Tenerife a Galicia pasando por la Toscana. El regreso al día a día de la 'princesa del pueblo' se presenta complicado, y es que la ex de Jesulín de Ubrique está dispuesta a declararle la guerra a su primer marido, Fran Álvarez.

El motivo no es otro que la nulidad eclesiástica. Belén y Fran se dieron el "sí, quiero" por la iglesia hace ya 11 años y ninguno de los dos ha solicitado la cancelación de esa unión a ojos de Dios. Ahora, Miguel quiere pasar por capilla porque su familia es muy religiosa y le ha pedido a su mujer que inicie el proceso.

La princesa del pueblo quiere hacer realidad los deseos de su marido pero no está dispuesta a pagar el cien por cien de la cuantía que supone, entre 2.500 y 3.000 euros, y aquí es cuando llega el problema: Fran Álvarez dice que le concede la nulidad, pero que no la paga, pues no es él quien la necesita.

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Según Pronto, la discusión no es nueva. "Belén habló de nulidad hace ya tres años, y dijo en televisión que Fran no se la quiso dar. Eso es mentira. Él nunca ha puesto ningún problema para ello, jamás. La cosa se paró porque ella quiso. Y lo que dice ahora Fran es lo mismo que dijo entonces: que se encargue ella de los trámites y los gastos porque es ella la que quiere y necesita la nulidad. Él ni tiene novia ni la quiere ni se le pasa por la cabeza la idea de casarse de nuevo", ha dicho Aurelio Manzano, íntimo amigo de Fran.

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