La reina ha recibido este martes a la nadadora y capitana del equipo español de natación sincronizada Ona Carbonell, con la que se ha mostrado muy cariñosa. Letizia ha recibido a su invitada con una amplia sonrisa y un fuerte abrazo y ésta le ha enseñado orgullosa sus últimas medallas.


Para la ocasión, la reina ha recuperado un vestido de fondo de armario de crepé rizado elástico, cuerpo ajustado y falda lápiz entallada con detalle de botones firmado por Michael Kors y cuyo precio supera los 1.500 euros. Lo ha combinado con unos salones rosas de Magrit, tal y como ya hiciera durante la recepción en Estados Unidos del año pasado, junto a Melania Trump. El tono coral es el más adecuado para lucir bronceado, una de las pasiones de Letizia.
Una vez más, ha lucido sus pendientes Doble Daga de Gold & Roses de oro y diamantes (de casi 2.000 euros) y su inseparable anillo de Karem Hallam (114 euros).

Por su parte, Ona Carbonell ha optado por un look en blanco formado por una falda midi troquelada y una camisa plus size de Victoria Beckham. En los pies, salones combinados en negro y beige de Uterqüe.

La deportista de 29 años y ganadora de la última edición de Masterchef Celebrity acaba de hacer historia al convertirse en la nadadora más laureada en mundiales (con 23 medallas), solo por detrás de Phelps y Lochte. Ona Carbonell ha vuelto del Mundial de natación de Gwangju 2019 con tres medallas: dos platas en solo técnico y solo libre, y un bronce por equipos en 'highlights'.
