La modelo ha sido la última invitada de Vicky Martín Berrocal en el podcast 'A solas con'. En una charla amigable y distendida, Esther Cañadas (46) ha recordado cómo fueron los años en los que una enfermedad autoinmune la obligó a bajar de las pasarelas y le puso la vida patas arriba: "Tuve dos o tres momentos de decir 'Este día aquí te quedas".

A la catalana le diagnosticaron vasculitis, una enfermedad autoinmune que produce la inflamación de todos los vasos sanguíneos: "Me estallaron todos los vasos capilares del cuerpo a la vez. Tenía receta de reposo absoluto de por vida", ha explicado. "Son enfermedades muy complicadas, que suelen ser crónicas y muy dolorosas. Me podía haber quedado ahí y no estar hoy contigo", ha dicho.

Su calvario duró seis años: "No es fácil convivir ni manejar, además de que no es fácil de curar. Tenía muchos efectos secundarios. Vivía con un 10% de la energía. He estado 6 años de mi vida luchando por salir". Tratamiento, meditación, reposo... Esther lo intentó todo para recuperar su vida: "Pasé por todas las etapas. ¿Tú sabes lo que haces en una vida en seis años? Yo he pasado etapas de pensar que me había perdido seis años de mi vida, pero no fue así, porque estuve luchando por salir de un sitio que era muy difícil".

La cura llegó y Esther pudo cumplir su sueño de ser madre. Su hija, Galia, tiene ahora ocho años: "Me lo paso genial con ella, es muy espabilada, divertida, se ríe mucho... He tenido la suerte de poder dedicarme por entero a ella, no me he perdido nada y eso es un regalo". Asegura que le hubiera gustado ampliar la familia: "Me encantan los niños, hubiera tenido 10. Aunque Galia vale por 10".

Tras su calvario, retomó también su carrera profesional: "Seguía sintiendo el cariño de la gente maravillosa de la moda y de firmas muy importantes que seguían preguntándome. Eso se siente muy bonito y decidí volver", ha confesado. "Tengo la enfermedad muy presente, pero no es algo en lo que piense a diario".

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