La viuda de Jaime Ostos, fallecido en enero de 2022, ha vendido el chalé en el que vivió junto al torero y en donde también residió Jacobo, hijo del diestro.
María Ángeles Grajal, que ha tardado un año en cerrar la operación desde que puso a la venta la propiedad, ha encontrado un comprador. Se trata de un acaudalado empresario español, que lo ha adquirido para algunos de sus hijos. En el anuncio del portal inmobiliario donde se ofertaba la vivienda se valoraba esta casa, situada en la localidad de Villaviciosa de Odón, en 850.000 euros.

Esta semana, la doctora Grajal se instalará en su nuevo domicilio, un piso de La Moraleja, con lo que podrá estar muy cerca de su hijo Jacobo Ostos.
Casi dos años después del fallecimiento del torero, durante unas vacaciones de Navidad en Colombia, sus hijos siguen enfrentados por la herencia del padre, aunque en realidad lo que se disputan son enseres, objetos personales del inolvidable matador y algunos cuadros.
Jaime Ostos tuvo en primer lugar dos hijos, Jaime y Gabriela, nacidos de su primer matrimonio con Consuelo Alcalá. Fuera del matrimonio, nació después Gisela, a la que reconoció con el paso de los años. Jacobo Ostos Grajal, es el último y el más cercano a su padre en los últimos años, ya que vivía con el matrimonio en la casa que su madre acaba de vender.
Pero las relaciones entre Jaime junior, el hijo mayor y su hermano Jacobo, se han deteriorado gravemente en las últimas semanas, cuando el primogénito ha insinuado públicamente que Jacobo podría no ser su hermano, ya que duda de que sea hijo de su padre, y tal vez exija una prueba de ADN para demostrar que no proceden del mismo progenitor.
Una afirmación que ha provocado el asombro de la doctora Grajal, una persona tranquila y enemiga de enfrentamientos, pero que ha indignado a su hijo, dispuesto a demandar a su hermanastro.
En el funeral celebrado en Madrid tras la muerte del torero, parecía haber una cierta armonía entre la viuda y los hijos, aunque Jaime Jr. no pudo llegar a tiempo por problemas en su vuelo desde Estados Unidos, donde reside. Poco después, en el homenaje que se le hizo a Jaime Ostos en Écija, su pueblo natal, quedó en evidencia el distanciamiento entre sus familiares, que ahora pueden acabar en los tribunales.