Se cumple mes y medio desde que el hijo de Rodolfo Sancho ingresara en la prisión de Koh Samui como medida preventiva tras haberse declarado culpable de haber asesinado a Edwin Arrieta. El director de la cárcel, Watcharapong Boonla-or, ha desvelado cómo es ahora el día a día del chef español, ya completamente adaptado a la vida penitenciaria.

Tras pasar unas primeras semanas abatido, deprimido y desubicado, Daniel ya es un preso más dentro de Koh Samui. Así lo afirma el director del centro, quien asegura en TardeAR que el hijo de Rodolfo Sancho se ha acostumbrado a sus nuevas rutinas: "Practica deporte y lee mucho. Como todos los presos en preventiva, está estudiando minuciosamente su caso para ayudar a su defensa. Pasa horas estudiando". Afirma, además, que pasa las horas tranquilo con una excepción: "Se estresa mucho con las visitas de su madre. Nos llama la atención porque se mostró muy tranquilo cuando vino su padre".

Una información que llama mucho la atención precisamente ahora que se ha hecho pública la nula relación entre sus padres. La falta de comunicación entre Rodolfo Sancho y Silvia Bronchalo es total, hasta el punto de llevar a cabo las mismas gestiones de manera paralela, como solicitar la representación legal de Daniel a través de un poder notarial. El distanciamiento era previo al suceso que tuvo lugar en Tailandia pero el protagonista de Mar de plástico ofreció una 'tregua' a su ex para formar un frente común por su hijo, algo que ella rechazó.

Boonla-or cuenta, además, que Daniel es un preso ejemplar y muy obediente: "Ha asumido todas las normas de prisión sin problemas. De hecho, le dimos la opción de dejarse el pelo corto y optó por raparse como todos los demás".

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