Se confirma la sentencia de cárcel contra el ex presidente francés Nicolas Sarkozy, que en diciembre de 2022 regresó al Tribunal de Apelación de París para intentar revertir la condena de tres años de prisión por corrupción y tráfico de influencias en una trama de escuchas telefónicas. Esta confirmación se ha hecho pública este miércoles 17 de mayo. Hace unos días, tal y como publicamos en este digital el 12 de mayo, Sarkozy compartió un almuerzo en un restautante en Madrid junto al también ex presidente José María Aznar y Borja Prado, presidente de Mediaset.
Pese a todo, Sarkozy, marido de la modelo y cantante Carla Bruni, no ingresará en prisión, porque el tribunal ha precisado que puede cumplir la pena en arresto domiciliario y con un brazalete electrónico.
Sarzoky fue condenado en marzo de 2021 por delitos de corrupción y tráfico de influencias después de que la Justicia francesa considerase probado que hizo uso de su posición para tratar de obtener información sobre una investigación.
El Ministerio Público le acusó de intentar obtener en 2014, a través de su abogado Thierry Herzog, información secreta, para lo cual habría recurrido al ex magistrado Gilbert Azibert, que entonces estaba en el Tribunal de Casación. Según los investigadores, el ex presidente ofreció a Azibert un puesto en Mónaco a cambio de datos relativos a una causa abierta por presunta financiación irregular de campaña.
Sarkozy gobernó Francia entre 2007 y 2012 y se convirtió en el primer ex jefe de Estado que se sentaba físicamente en el banquillo de los acusados, ya que aunque en 2011 su antecesor en el Elíseo, Jacques Chirac, también fue condenado a dos años por delitos cometidos durante su etapa como alcalde de París, nunca llegó a pisar los tribunales por motivos de salud.