Feliz y muy ilusionada. Así se encuentra la representante e íntima amiga de Ana Obregón, que este viernes ha concedido diversas entrevistas. Susana Uribarri ha desvelado que habla con la actriz a diario y que conoce a la niña por videollamada: "Es la princesa de Ana, nosotros la llamamos Anita. Es buenísima, duerme mucho y come muy bien. Está sanísima y la viste con muchos lazos y mucho rosa", ha dicho.
Susana no quiere entrar en debates morales ni éticos: "Ana está llena de luz, tiene una sonrisa que no veíamos desde hace años. Esta niña le va a devolver la vida. Ya tiene a quién amar, por quién luchar y todo. Estoy convencida de que será una grandísima madre, ella está feliz y yo la aplaudo. Estoy deseando abrazarla y achucharla", ha contado en Y ahora Sonsoles.
Insiste en que ni ella ni Ra han filtrado información a la prensa sobre los planes de Obregón porque "ni lo sabíamos ni se nos pasaba por la cabeza. Nos dijo que necesitaba irse unos días para vivir su luto porque acababa de terminar el libro de su hijo y que necesitaba descansar y ver el mar, nada más". Y no quiere, además, entrar en teorías sobre quién es el padre de la niña: "No tengo ni idea, no tenía ni idea de esto, imagínate de lo otro. No he entrado con Ana en detalles. Ahora está centrada en la niña, cada vez que la llamo la pillo entre un biberón y otro y no quiero hablar de eso por teléfono. Cuando vuelva a España y esté tranquila, ya me contará".
Sobre su regreso a España también está pez: "No tengo ni idea de cuándo volverá, pero estoy segura de que el 19 de abril, que se presenta el libro de su hijo Aless, no podrá estar aquí. Ella es una madraza y se va a asegurar de que la niña esté perfectamente para viajar. Quizás un vuelo tan largo pueda perjudicarle ahora, porque apenas tiene una semana de vida".