La tertuliana está indignada. El debate y la polémica que se ha generado tras la maternidad por gestación subrogada de Ana Obregón a los 68 años le hace rememorar viejas heridas. Y es que Tamara Gorro fue madre de su primera hija gracias a un vientre de alquiler en Estados Unidos. Entonces también fue muy criticada: "Me hicieron mucho daño. Se fomenta mucho odio".
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La ex de Ezequiel Garay ha contado su experiencia y ha empatizado con todas las mujeres que, como ella, deciden ser madres gracias a una gestante: "Se pasa tan mal cuando una mujer no puede ser madre, que no se recurre a este método por gusto", ha dicho, queriendo dejar claro, ante todo, que esta "en contra de que a una mujer se le obligue a hacerlo en contra de su voluntad".
En su caso, Tamara contactó con una agencia y conoció a su gestante por videollamada, eso sí, previamente ambas recibieron un informe: "Nos conocimos, nos aceptamos y comienza el proceso. En Estados Unidos arranca cuando da positivo el embarazo y el juez en todo momento está pendiente de que se esté cumpliendo todo por ambas partes". Tamara ha querido dejar claro que no hubo compensación económica para la gestante: "En mi caso, no, y estoy segura de que en el caso de Ana Obregón tampoco lo ha habido. Lo que pagas son los gastos médicos derivados del proceso, estaría bueno que lo pagara ella".
Gorro estableció prácticamente una amistad con la gestante de su hija: "Me iba de compras con ella y con sus hijas. En el parto estaba también su marido, la suegra... ¿Tú sabes cómo lloraba ella? ¡Qué bonito! Eso es precioso". La gestante, tras dar a luz, le dijo a los enfermeros: "Dadle la niña a su madre". Y es que según Tamara, "la madre no es la que pare, es la que cría, enseña, educa y la que da amor". La colaboradora ha pedido respeto por Ana y ha asegurado que tendremos que escucharla para después opinar: "Va a callar muchas bocas cuando hable".