El próximo jueves 23 de marzo, Belén Rodríguez celebrará su 57 cumpleaños alejada de algunos de los que fueron sus amigos del alma, entre ellos Jorge Javier Vázquez y Kiko Hernández, que la han desterrado de sus vidas desde que el año pasado fue acusada de filtrar las intimidades de María Teresa Campos a los paparazzi.
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Tampoco estarán a su lado Terelu y Carmen, las hijas de la veterana periodista, que calificaban a Belén como "una hermana". Ya no es bienvenida en la casa de la comunicadora octogenaria, la hermandad se rompió definitivamente y Rodríguez hace mucho que no visita a la que ella consideraba una segunda madre.
Aunque intenta pasar página y no hacer caso a los ataques indiscriminados de los que fueron sus compañeros en Sálvame, en el fondo echa de menos los viajes con Jorge o las quedadas con Kiko y las hermanas Campos. Tendrían que cambiar muchísimo las cosas para que aquellos días se repitan.

La hija de la recordada Doña Adelaida (Chari Gómez Miranda) y el periodista Pedro Rodríguez se ha refugiado en sus amigos anónimos, los de Madrid de toda la vida y los de Málaga. Hace unos días la veíamos disfrutar de un fin de semana en la capital andaluza. Por las calles madrileñas se la ve poco, una de las últimas veces en compañía de su íntimo, el periodista Aurelio Manzano.
Hace una vida muy tranquila y aparece a ratos por televisión, a pesar de que es una gran experta en temas del corazón. Estuvo como comentarista en el reality Pesadilla en el paraíso, y poco más. Es una excelente tertuliana pero parece haber caído en desgracia desde que Vázquez y el resto de ex amigos le pusieron la cruz.