"Es increíble las cosas que os podéis inventar, me parece una falta de respeto". Así respondió la novia de Iñaki Urdangarin hace unos días cuando se le preguntó por los rumores de un supuesto embarazo. Sin embargo, las palabras de Ainhoa Armentia no han logrado detener el cotilleo en Vitoria: "Ya se le nota la barriguita".

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Lo dice un vecino que coincidió con ella hace pocos días en los pasillos de un supermercado de la ciudad: "La vi de frente y tenía la gabardina abierta, un jersey blanco y se le veía una barriguita sospechosa y dije 'Buah, qué fuerte", ha contado esta persona en Sálvame. "Luego, cuando fuimos a pagar a la caja, vino una chica del supermercado y le dijo a la cajera 'Está la de Urdangarin, fíjate en la tripa".

Lo cierto es que Ainhoa pudo zanjar el tema (y no lo hizo) cuando un reportero le preguntó hace unos días: "¿Desmientes el embarazo?". La novia de Urdangarin guardó silencio durante unos segundos y después, tras una sonrisa, zanjó: "No sé, dímelo tú". Un desmentido muy vago que, como decíamos, no ha logrado detener el rumor. El tiempo se encargará de dar la razón a unos u otros.

Lo que sí es cierto es que tanto Iñaki como Ainhoa quieren oficializar su relación y asentarla de una vez por todas. De hecho, Urdangarin ya habría dicho a sus hijos mayores, Juan y Pablo, que se casará con su novia en cuanto firme el divorcio de la infanta Cristina, previsto para junio, cuando Irene, la pequeña de los cuatro hijos de los ex duques de Palma, cumpla 18 años.

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