Cuando la cúpula de la cadena de Fuencarral capitaneada por Alessandro Salem impuso la nueva normativa ética muchos sabían que algunos periodistas y tertulianos lo iban a poner difícil. Y no se equivocaron. Belén Esteban es una de las más problemáticas y ya son varias las ocasiones en las que se ha pasado el Código por el arco del triunfo. La última, este martes: "Me da igual", ha dicho.

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El corrillo hablaba de Pinocho y su demanda de paternidad cuando Belén nombraba a Kiko Rivera, una de los vetos de Salem: "¿Por qué no hablamos de que 'Pinocho' vendió a Kiko Rivera?", preguntaba la princesa del pueblo. "Al hermano de Isa Pi", le ha corregido inmediatamente Jorge Javier Vázquez. La colaboradora le ha ignorado y ha repetido el nombre de Kiko Rivera, lo que ha hecho que el presentador volviera a interrumpirla: "¿Me dejáis acabar?", ha pedido, enfadada. "Kiko Rivera, no hermano de Isa Pi". Ante la regañina de Vázquez, Belén ha intentado salir del plató: "Me da igual que no se pueda nombrar".

La rebeldía de Belén no le saldrá gratis. El pasado mes de febrero, Informalia adelantó en exclusiva que la ex de Jesulín de Ubrique ya había recibido un toque de atención por parte de sus jefes: "La han amonestado y le han dicho que las cosas han cambiado y que ahora no pueden estar tolerando determinados comportamientos. Que con esas cosas pone en un aprieto a la productora puesto que sobre ella recaerán las consecuencias de cualquier amonestación". Y más: "Podrían dejarla unos días en la nevera, sin acudir al programa, si no está dispuesta a moderarse".

Así las cosas, la última salida del tiesto de Belén este martes podría tener consecuencias muy serias para la de Paracuellos.

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