Belén Esteban está en un momento determinante de su vida: centrada en su recuperación (tiene otra operación pendiente) y en el momento en el que se encuentra Telecinco y su programa, Sálvame. Además, todavía no ha dejado atrás la encrucijada que tiene con su ex representante, Toño Sanchís, en los juzgados.
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Tiene novedades: "El día 26 de enero me llamó mi abogado para decirme que después de todo este tiempo (tres años), en el que todo se paró por el Covid, ya por fin nos lo han admitido por lo penal. Por eso estoy muy contenta", ha explicado este miércoles en Semana.

A la princesa del pueblo no le daría ninguna pena verle entre rejas: "Yo le acuso de una serie de cosas que ya el juez dirá o no, pero yo confío en la justicia y, si tiene que ir a la cárcel, lo siento mucho". No piensa permitir que todo quede en vano: "Quiero que España sepa que llevo razón. Él no me da ninguna pena".
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Y da donde más duele: "Yo sé que este verano se fue con su mujer, Lorena, a un velero a Palma de Mallorca y me parece muy bien que se vaya de vacaciones con la familia, pero primero que pague lo que debe. Que él está viviendo de un dinero que es mío, no suyo". Para ella también tiene unas palabras: "Ella es la dueña de la empresa, ¿no? Ella sabía lo que se movía ahí, ella es la mano que mece la cuna".

Belén rompió con su representante en 2015 tras casi una década contando con sus servicios. A lo largo de estos años han protagonizado guerras judiciales y mediáticas que siguen abiertas a día de hoy. Incluso Belén se quedó con su casa tras salir a subasta. Una vivienda que al final le trajo más quebraderos de cabeza que otra cosa debido a todo el dinero que tuvo que invertir en ella, pero que le sirvió en cierto modo de venganza.
Su próxima operación y 'Sálvame'
La madre de Andrea Janeiro tiene que volver a pasar por quirófano por los problemas que sigue arrastrando a raíz de su rotura de tibia y peroné: "Me tienen que operar dos dedos porque de la fractura tan grande que me hice se me ha quedado el tendón cogido en los dedos y los tengo doblados. No puedo estirarlos y el doctor me ha dicho que tienen que abrirme para cortarme los tendones y que esos dedos por fin tengan movilidad".
Sobre su situación en Sálvame, que no pasa por su mejor momento debido a la crisis de audiencias de Telecinco también se ha pronunciado: "Sálvame me salvó la vida en mi peor momento (...) Me ha hecho ser la mujer que soy hoy. Por eso siempre seré la persona más leal que existe con mis directores". Piensa seguir con ellos hasta que el barco se hunda: "El día que acabe, yo acabaré con él. Pero no hablo de ahora, que se oyen muchas cosas, yo acabo de renovar y estoy muy feliz en mi trabajo. Mientras dure, que espero que sea mucho, yo estaré".
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