El ex futbolista retomó el pasado fin de semana uno de sus deportes favoritos: el esquí. Su condición como profesional de primera línea le había impedido practicarlo en los últimos años y el sábado fue el día elegido por Gerard Piqué para deslizarse por las montañas de nieve junto a su nueva novia, Clara Chía. Eso sí, no lo hicieron en Baqueira Beret, a pesar de que así lo aseguran algunos medios. Los enamorados optaron por una estación mucho más discreta y menos frecuentada por altas personalidades: La Masella.
El ex de Shakira y la joven barcelonesa no esconden su relación pero tampoco se sienten a gusto bajo el objetivo de las cámaras y quisieron evitar el mal trago en Baqueira, donde es habitual la presencia de fotógrafos. El pasado fin de semana, de hecho, estaba repleto gracias a la visita del rey Felipe, que se 'escapó' con un grupo de amigos con los que disfrutó del deporte blanco y de la buena gastronomía.
Piqué y Clara disfrutaron de una jornada parecida a unos pocos kilómetros de distancia, concretamente en la estación de esquí La Masella, como asegura Lorena Vázquez. "He esquiado hoy, 25 años después de mi última esquiada... He sentido cosas de cuando era niño. No quiero decir el sitio, quiero volver a ir y la gente molesta, pide foto tal y te caes. Hay momentos y momentos. Ha estado muy bien", comentó el deportista en Twitch.