La situación en el tanatorio de Alcalá de Guadaíra donde descansan este viernes los restos mortales de Bernardo Pantoja ha llegado a una situación límite. A última hora de la tarde, Anabel ha protagonizado un desencuentro con una de las amigas de Junco, viuda de su padre. La pelea ha subido de tono y ha llegado a las manos, con Merchi y el peluquero y amigo de Isabel Pantoja, Antonio Abad, de por medio también.
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Según Sálvame, la tensión se remonta hasta las primeras horas de la mañana, cuando estas dos amigas fueron al hospital para acompañar a Junco. La japonesa pasó dos horas en la cafetería con ellas y al regresar a la habitación de su marido, la encuentra vacía: Bernardo había fallecido y nadie la había avisado. Estas amigas se la llevaron a casa, la calmaron y la acompañaron después al tanatorio.
Una vez aquí, Junco, que tiene problemas con el idioma, vio a Anabel Pantoja firmando unos papeles con el responsable del tanatorio y le pidió a una de estas amigas que se acercara y se enterara de lo que estaban haciendo. Al hacerlo, comenzó un intercambio de acusaciones y palabras mayores que acabó en gritos e incluso manotazos. Según testigos, Merchi intervino también al ver a su hija en esa tesitura, pues Anabel, fuera de sí, gritaba: "Esto es lo que querías. Ahora vas y se lo cuentas a la prensa". Junco, por su parte, intentó separarlas y poner calma. Finalmente, las amigas abandonaron el centro funerario.
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