Antes de finales de año, Curro Romero le dará el 'sí, quiero' por la Iglesia a su esposa, Carmen Tello (63), con quien lleva casado por lo civil desde 2003. Con la muerte de Concha Márquez Piquer en octubre del año pasado, el torero, a los 88 años, consiguió la nulidad matrimonial que la coplera tanto le negó.
"La boda se celebrará en la intimidad este mismo año, pero no queremos darle publicidad ni que sea un acontecimiento mediático", ha confesado Tello en La Razón. La socialité obtuvo la nulidad matrimonial de su primer matrimonio con el marqués Miguel Angel Solís también en 2003.
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Carmen y Curro, fieles a su discreción, no están preparando ninguna exclusiva: "Ya repartiremos fotografías nosotros a quien nos las solicite. Estamos con los preparativos, pero aún no tenemos la fecha exacta, en unos días la sabremos. Pero, como le digo, mi marido no quiere que se le dé mucho revuelo", ha añadido.

La que fuera amiga íntima de la duquesa de Alba espera este día como agua de mayo, pero de tanto esperarlo la emoción se ha ido esfumando: "Llevamos tantos años esperando que no me lo imagino, ya casi es un puro trámite. Dios ha querido que sea así. Pero lo que importa es que, por fin, será una realidad".
En este día, tendrá en su recuerdos a dos personas muy especiales: "Está boda se la voy a dedicar a mis padres, que eran muy creyentes y murieron sin poder ver este sueño hecho realidad. Pero desde el cielo lo verán. A Curro le querían muchísimo".
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El diestro está muy emocionado. La boda será un soplo de aire fresco entre sus problemas de salud: "Le acaban de realizar una revisión y está bien. Pero le ha comenzado a afectar el Parkinson y sigue un tratamiento que parece dar buenos resultados. Es muy efectivo", ha explicado Carmen.