A Gerard Piqué le perturban la vida hasta los muertos. Resulta que la inmobiliaria que preside su padre pagó veinte millones de euros por un amplio terreno en tierras malagueñas, con la intención de invertir otros cincuenta para construir un hotel de cinco estrellas. Un proyecto faraónico que podría venirse abajo.

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Pues bien, en las excavaciones se ha encontrado un cementerio con 250 tumbas, la mayoría de ellas, vacías, lo que supone un retraso en los trabajos mientras un grupo de arqueólogos opera sobre el terreno.

El futbolista no gana para disgustos. Problemas con su ex Shakira tras su ruptura, escaso protagonismo en el terreno de juego por no hablar de ridículo, y ahora la aparición de los muertos. Todo son problemas. Incluso se acaba de publicar en diversos medios que el Fútbol Club Barcelona estaría ya negociando adelantar la rescisión del contrato del central antes de su finalización en el 2024.

En el entorno de Gerard consideran que "tanto contratiempo le está afectando bastante". Recuerdan que "no consigue llegar a un acuerdo con Shakira en lo que se refiere a los asuntos relacionados con sus dos hijos" y apuntan que "ha perdido totalmente el protagonismo en su equipo". Lo de las tumbas es una nueva faena que contribuye a minar su ánimo: "Es un tío con una gran fortaleza, pero hay momentos en los que se viene abajo", nos aseguran. Su novia, Clara Chía, es su mayor apoyo en los momentos más duros. En ella ha encontrado la estabilidad que visto lo visto le faltaba con Shakira.

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