Tajante. Así se ha mostrado la viuda del marqués de Griñón este martes al hablar de su polémica ruptura con el juez Santiago Pedraz. Esther Doña, que hace solo unos días esperaba tener una conversación con él y arreglar las cosas, ha cambiado de idea y da portazo a la reconciliación: "Eso se acabó, se acabó, pues ya. Se asume y adelante. ¿Voy a estar recreando yo en el dolor? No".
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En conversación con Sálvame, Doña ha anunciado que no volverá a hablar del tema: "No quiero hablar más de este tema, ya quiero zanjarlo. Este tema, de verdad, me hace daño, estoy cansada de él, quiero olvidarlo ya, que cada uno haga su vida y que pase el tiempo", ha dicho. "Él ha hecho sus declaraciones y yo las mías y no voy a hacer más. La gente que me conoce, que es la que me importa, sabe cómo soy y creo que lo estoy haciendo bien".
La que fuera madrastra de Tamara Falcó no tiene pensado dar más detalles sobre la sorprendente ruptura con Pedraz aunque no descarta hacerlo en el futuro: "Ahora no voy a conceder entrevistas, más adelante no lo sé. Solo me quiero centrar en el trabajo, un proyecto de televisión y que al final con todo eso se ha nublado. Entonces, vamos a ver si encauzamos las cosas".
Eso sí, no ha querido hablar sobre los rumores que apuntan a su complicado carácter ni tampoco a la relación especial que podría estar entablando con un acaudalado empresario llamado Bruno, con el que se consoló en Ibiza tras su tremenda bronca con Santiago Pedraz.
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