Sorprendentes declaraciones de Miriam Sánchez una semana después de protagonizar una terrible pelea en plena calle con Pipi Estrada. Entonces él afirmó que su ex, y madre de su hija, tenía problemas muy serios que solo curaría ingresando en un centro, pero ella ha dado la cara este martes y ha dado una versión muy distinta de la historia: "Yo no soy bipolar ni nada de eso. Voy al psicólogo y tengo ansiedad porque me la provoca este señor. Llevo diez años tragando mierda".
Miriam, algo alterada, ha desvelado que mantiene una lucha por la custodia de su hija desde hace años: "A mí no me trata bien con respecto a mi hija. No tengo ni voz ni voto. Me amenazó en 2013 y me dijo que yo era una actriz porno y él un periodista reputado y que si luchaba con él, ganaría la custodia", ha contado en Sálvame. "Pipi me ha dicho toda la vida que valgo una mierda".

La que fuera asesora de Mujeres, Hombres y Viceversa estaba visiblemente alterada: "Llevo 10 años callada y el principal motivo es mi hija, llevo diez años tragando mierda de Pipi Estrada, pero es un mentiroso y ya estoy harta. Él me decepciona continuamente, me anula como persona. Yo sigo en España por mi hija, que la amo y la adoro, si no ya me habría ido de este país". Y añade: "Estoy tan cansada... ¿Cómo puede decir nada de mí? Yo he escrito muchos diarios de todo lo que he vivido con él y si salieran... Este señor no me deja levantar cabeza".
Además, Miriam señala que Pipi también es responsable de gran parte de sus problemas financieros: "Me debería pagar los psicólogos y han sido muchos, porque la mitad han sido por su culpa". El entorno de Sánchez afirma también que el periodista "ha escatimado con ella hasta el último euro que debía pasarle a su hija. Miriam ha corrido con todos los gastos de su hija durante mucho tiempo y mientras él ha despilfarrado su dinero en fiestas y en amigas".
Solo unas horas antes, Miriam había utilizado las redes sociales para lanzarle un mensaje a Pipi: "Cuando el mentiroso se ve acorralado se enoja o se hace la víctima". Su ex, por su parte, aseguraba que "las mezclas de químicos y alcohol no son buenas" y que estaba "apenado por el estado en el que se encuentra Miriam".