En las primeras horas de este domingo 28 de agosto, no nos consta que se haya producido declaración alguna de Esther Doña desmintiendo que haya finalizado su relación con Santiago Pedraz. Según la última entrada en su cuenta de Instagram, sigue dándose a la bebida, desnuda en el jacuzzi y mirando por la ventana. Y eso que han pasado varios días desde que, como recogimos, muchos medios difundieran y dieran por hecha la ruptura, incluso atribuyendo al juez la frase "No es la mujer que creía". ¿Cuál será la explicación de este atronador silencio de la viuda del marqués de Griñón? De momento, ni siquiera ha subido la portada de marras a su Instagram, como suele hacer cuando ocupa la primera página del templo de la crónica rosa, donde se ha prodigado en numerosas ocasiones. El título de este post es Cuatro bodas y un dineral porque la próxima hubiera sido la cuarta para Esther. Otra opción era Cuatro bodas y un lodazal. Sería bonito que Tamara Falcó dijera algo, aunque solo fuera "o sea".
Nos cuentan que la cantidad apalabrada por Esther Doña con la revista Hola a cambio de la exclusiva de su compromiso matrimonial con Santiago Pedraz tiene al menos cinco cifras. Semejante suma puede ser suficiente motivo para que la marquesa viuda de Griñón decidiera callar la ruptura con el juez, incluso habiéndose producido días antes del cierre de la edición del semanario que salió a la venta el miércoles 24 de agosto pero que podía haberse levantado hasta media tarde del lunes 22.
Entre los periodistas se repite con retranca e ironía ese dicho que reza: "No dejes que la verdad te estropee un reportaje". Si asumimos que la publicación era ajena al final de la relación entre la malagueña y el magistrado, podríamos aplicar a la ex modelo la versión siguiente: "No dejes que la ruptura te arruine el exclusivón".
Pero la grotesca historia del anuncio de la cuarta boda de la viuda de Carlos Falcó tiene más aristas. Nos dicen que el semanario, por lo general, abona este tipo de facturas a los 45 días. Si éste fuera el caso, detalle que ignoramos, Esther Doña podría haber hecho el ridículo gratis o tal vez verse obligada a pactar un precio inferior al acordado inicialmente.
Cabe la posibilidad también de que la que fuera esposa del padre de Tamara Falcó compensara en los próximos días a la revista paganini con otra exclusiva, relatando los pormenores del desaguisado, contando en el mismo semanario en el que dijo que se casaba el próximo verano su versión de tan rocambolesca circunstancia; lo cual explicaría el sobrecogedor silencio de la marquesa viuda a estas alturas, cuatro días después de filtrarse que se había abortado el cacareado compromiso matrimonial antes de que España entera supiera que Pedraz dejaba a la andaluza porque, un año después de que Informalia descubriera su romance con el juez Pedraz, se ha dado cuenta de que Esther no es la mujer "que creía que era", poniendo entre comillas la frase que algunos medio atribuyen al juez.
#Primicia Esther Doña y el juez Santiago Pedraz: risas, complicidad y karaoke en la zona más 'cool' de Madridhttps://t.co/oVuqp2fMrV
— Informalia (@Informalia) July 30, 2021
El noviazgo entre la cuarta esposa del marqués de Griñón y el jurista salmantino ha sido expuesto públicamente por Esther hasta el empalago y, por lo que parece evidente, con la complicidad de su novio, partícipe de sus instagrames, sus posados y demás exhibiciones mediáticas. Es normal por tanto que el anuncio de su compromiso, con detalles de su declaración de amor, del anillaco comprado en Suárez por una amiga íntima de la pareja y demás aspectos del culebrón fueran objeto de deseo de Hola, que repartió su portada entre estos tortolitos con Gerard Piqué con su jovencísima conquista, que tiene la mitad de años que Shakira.
Sería imperdonable que Hola no nos ofreciera a sus fieles lectores una explicación de esta tragicomedia. Cuentan que la crisis entre Pedraz y Esther ha sido terrible pero que ella no avisó del desastre a la revista porque albergaba la esperanza de arreglar el desaguisado. Quedan horas para que la edición del miércoles se cierre y pueden ocurrir varias cosas:
1) Esther Doña se arregla con el juez, no se admite la bronca y la exclusiva sigue valiendo. Y hasta veríamos el verano que viene la que sería la cuarta boda de Esther (tercera de Pedraz), una exclusiva que valdría un dineral.
2) Esther Doña se sincera una vez más en Hola y se presta a contar lo ocurrido, dando la versión que le parezca oportuna y saciando nuestra curiosidad y nuestra sed de explicaciones, lo cual compensaría a la publicación de la supuesta pifia que le jugó la malagueña la semana pasada.
3) Otras opciones: silencio absoluto para ganar tiempo, o vaya usted a saber. Todo cabe. Un repor de Esther en Disneyland, o un titular tipo Esther se hace coach al estilo de Isabel Sartorius, o nos encontramos una página de Esther tipo Esther se vuelca en la calceta, o Esther estalla: "No puedo más". O ese de Primeras imágenes de Esther tras tomarnos el pelo… Veremos.
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