Kiko Hernández se ha sometido a un implante capilar, según publica en su portada de este miércoles Diez Minutos, en un reportaje que incluye fotos tras pasar por quirófano para ponerse más pelo, una decisión que llevaba tiempo meditando.
Kiko Hernández cumple 46 años en apenas unos días y el paso del tiempo es implacable: se estaba quedando algo calvo y, adelantándose a lo inevitable, ha pasado por quirófano para someterse a un injerto de pelo.
El gran hermano ha aprovechado el parón de vacaciones veraniegas para someterse a este tratamiento estético, que se suma a lifting facial que se hizo en mayo.
¿Pago en especie?
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Fue el pasado 5 de agosto, cuando el padre de Abril y Jimena acudió a la clínica Livet de Madrid, donde se sometió al injerto. El centro médico informó de la intervención a la revista, por lo que no nos extrañaría que, a cambio de la publicidad, a Kiko le saliera gratis o muy barata la operación. De habérsela regalado, tal vez la Agencia Tributaria preguntará si eso es algo así como un pago en especie, pero, en todo caso, eso el ago que llegado el momento, el contertulio sabrá resolver como buen ciudadano. Mientras, Kiko ha dicho en el semanario que está "muy contento con el resultado" y encantado con todo el equipo de la clínica Livet, en Madrid, en especial con el doctor Gómez Villar. "Trabajo en un medio de comunicación y la imagen es muy importante, pero sobre todo quiero que mis hijas me vean guapo y joven", explica Kiko.