Desde que se separó de Gerard Piqué hace unos meses, Shakira no deja de sufrir. Sus amigos la protegen y se han convertido en su paño de lágrimas, como Alejandro Sanz. Y son ellos quienes la aconsejan. Si algo tiene claro la cantante colombiana es que quiere huir de España e instalarse en Miami con sus hijos, pero el futbolista se niega en rotundo. La intérprete le ha ofrecido contrapartidas en las negociaciones entre los abogados, pero Piqué sostiene q los niños tienen en Barcelona su arraigo, su colegio, sus amigos y su familia más cercana y no está dispuesto a que se vayan tan lejos por mucho que Shakira esté dispuesta a asumir su manutención completa y un amplio régimen de visitas.

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De ahí que la de Barranquilla esté utilizando todos sus recursos y contactos para hacerle cambiar de opinión. Según ha podido saber Informalia, lo último que le han recomendado argumentar sus abogados es "la presión mediática que están sufriendo los pequeños y ella misma desde que se hizo pública la separación y se supo que el futbolista tenía otra ilusión y que había tenido otras tantas". Y Shakira es lo que quiere demostrar, que por culpa del futbolista del Barcelona, al que considera único responsable de la separación, sus hijos han perdido en calidad de vida como consecuencia del interés mediático que han generado.

Que todo es por las idas y venidas de Piqué, sus amigas, sus fiestas, sus viajes y sus fotografías robadas en diferentes puntos del mundo y fechas. Todo eso le hace estar siempre en el punto de mira informativo y por ende "afecta a sus dos hijos, que no se pueden mover con libertad por la Ciudad Condal", nos apuntan. Tanto es así, que hace unos días protagonizó un encontronazo con la prensa, reporteros y paparazzi que se pasan las horas muertas en la puerta de su casa. Shakira les amonestó e incluso les grabó con su móvil. Pura estrategia.

La cantante cree que en Miami, donde han pasado largas temporadas, hay excelentes colegios y ella posee una mansión, y cree que allí todo cambiaría. "Es la ciudad perfecta para pasar desapercibidos y alejados de la prensa. Allí sus hijos podrían llevar una vida más tranquila. Además allí tienen grandes amigos. Y eso es lo que quiere, que esta separación no perjudique a sus hijos", indican a este medio.

Una de las cosas q más le preocupa a la cantante a sus 45 años es que todos los que estuvieran a su alrededor no sufrieran y en especial Sasha y Milan. De hecho, en las ultimas fotos que se publicaron de ella con los niños estando de vacaciones se la pudo ver protegiéndoles, consolándoles y besándoles en repetidas ocasiones. Piqué también está pendiente de sus pequeños. De ahí que no esté dispuesto a aceptar que vivan fuera de Cataluña.

"Piqué se niega a que sus hijos se vayan fuera de España, y menos a Miami, hasta donde hay 9 horas de vuelo. Eso le impediría tener contacto habitual con ellos puesto que el futbolista, durante la temporada, raras veces dispone de dos días seguidos para poder viajar a verlos", nos apuntan.

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Es este punto, que los niños residan en Miami o Barcelona centra la separación del culé y la cantante. Lo demás no les importa. Ambos tienen un patrimonio económico individual millonario y lo único que les une son sus hijos y el deseo de tenerles cerca. Ninguno tiene previsto dar su brazo a torcer, pero ella está dispuesta a hacer lo que sea por llevarse a sus hijos a Miami, donde se quiere instalar para recuperarse y empezar una nueva vida, siempre acompañada de sus pequeños.

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