Todos buscan a Ana María Aldón, se preguntan qué es de su vida en las últimas semanas, poco trasciende y se dan demasiados palos de ciego. La respuesta la tiene un hombre que maneja los destinos de la mujer de José Ortega Cano, y que es quien decide los pasos que la sanluqueña tiene que dar a diario.
Se llama Fernando Piniella y es su representante, y la persona que ha decidido que Aldón se aparte temporalmente del panorama mediático. Así pues, al margen de que su marido la exigiera que abandonara la televisión, la segunda mujer del torero cartaginés sigue las instrucciones de esta persona. No hubo ultimátum de Ortega, nos dicen, quizá una petición desesperada.
La crisis matrimonial se hace evidente, el diestro y la madre de su único hijo biológico juegan al ratón y al gato y se esquivan, cuando uno va la otra viene. Ana necesitaba desconectar, sopesar los pros y los contras de una unión que no parece satisfactoria.
Mucho tienen que cambiar las cosas para que el matrimonio se reconduzca. Ortega pierde los nervios a menudo cuando se topa con un periodista, se muestra airado, y mientras ella ni atiende al teléfono. La tensión familiar es más que evidente.
Fuera del domicilio conyugal
Y Fernando Piniella, antes que Ortega, es la mano que mece la actitud de una Ana María Aldón que vive momentos difíciles. Pero una fuente te cercana a la diseñadora nos filtra que ella "tiene muy claro que debe montar su taller de costura fuera del domicilio conyugal, trasladarse laboralmente a un local del centro de Madrid para trabajar a gusto y con libertad".
En cuanto a la televisión, acabó su contrato con Viva la vida a finales de junio, el programa desparecerá dentro de dos semanas de la parrilla de Telecinco, y ya veremos si Aldón prioriza volver a la pequeña pantalla (y en qué programa) por encima de los contrarios deseos de su esposo.
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El martes 5 de julio Ortega Cano entró en directo en Sálvame para desmentir que Gloria Camila le exigiera a su mujer que cambiara de representante, tal y como había contado Kiko Hernández. Después salió a la luz que Ana María Aldón había prescindido de los servicios de su mánager sin darle ningún tipo de explicaciones. "Me he enterado por televisión de que ya no trabajaba conmigo", dijo Marc Florensa a la revista Semana.
"Estoy muy perdido. Llevo 15 días sin poder contactar con ella. Yo le tengo muchísimo cariño y espero que sea algo producto de la situación en la que está y que no sea como se está contando. Quiero que me lo explique, porque aún nadie se ha puesto en contacto conmigo", añadió el representante, que ha trabajado con otros rostros conocidos como Belén Esteban o Anabel Pantoja.
Ante la 'desaparición' de la mujer del torero, Florensa también tuvo que cancelar compromisos profesionales que ya tenía pactados con ella: "Tenemos contratos y asuntos pendientes para los próximos 3 meses que no sé cómo van a terminar porque no tengo información de ella", dijo.
¿Qué le pasa a Ana María Aldón?
Emma García hizo público que "un médico le ha recomendado a Ana María que se le aleje de la televisión". Según contó la presentadora vasca, la diseñadora no pasaba por un buen momento de salud mental y por eso ya se puso "en manos de la medicina". Alejarse de la televisión también fue una petición que, tal y como adelantó Informalia, le hizo el torero a su mujer tras las últimas polémicas y rumores de crisis. "Ana se ha dejado seducir por la fama, el dinero y la sensación de salir por televisión y eso la está cambiando. Por eso, Ortega Cano le ha pedido que deje la tele", nos dijo una persona muy cercana a la familia.
José Oretega Cano (68) contrajo matrimonio con Rocío Jurado, el 17 de febrero de 1995, en la finca Yerbabuena en Castilblanco de los Arroyos. En diciembre de 1999 adoptaron dos niños, José Fernando (18 de junio de 1993) y Gloria Camila (21 de febrero de 1996), ambos de origen colombiano. El 9 de febrero de 2013 Ortega tuvo su primer hijo biológico con Ana María Aldón, que ahora tiene 44 años. El pequeño se llama José María. Ana María también tiene una hija, Gema, de una relación anterior. El 27 de septiembre de 2018, seis años después de iniciar su relación, la sanluqueña y el torero se casaron por lo civil en una notaría zaragozana.
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