Está atacado. Y no solo por los nervios propios que suelen provocar todos los preparativos que acarrea una boda, sino porque Kike Calleja, uno de los reporteros estrella de Sálvame, teme que su implicación en la Operación Deluxe, le salpique demasiado y se le fastidie.
No solo la boda, sino también la exclusiva que ha firmado con una revista. Kike es uno de los redactores del programa que ha sido salpicado por la investigación policial abierta por extorsión a un sinfín de famosos. Muchos de ellos han denunciado y, de hecho, el pasado día 13 se celebró la primera vista a la que tuvieron que asistir los gallifantes de la Fábrica de la tele, Óscar Cornejo y Adrián Madrid imputados por un supuesto delito de revelación de secretos y cohecho negociado a título individual.
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El sumario argumenta que Calleja ha tenido una participación activa en los hechos. Tanto es así que fue detenido y llevado a estancias policiales por la obtención y distribución de información confidencial. De acuerdo con los documentos del proceso, él era uno de los que presuntamente pedía información al policía imputado. Las consecuencias podrían ser graves para Kike. De ahí los nervios, casi el "histerismo" del reportero, en palabras de una fuente según la cual "llegó a escribir en sus redes sociales" esto: "A los que desean el mal nada mejor que la vida te lo devuelva con cosas que celebrar. Pues hala hoy a brindar", reza lo publicado por el propio Kike hace unas semanas en Instagram.
Y en medio, la boda
Kike Calleja se casa el 8 de julio, en plena tormenta por el caso Deluxe. Está imputado y se teme que le va a salpicar. Grabaciones en poder de la Policía demuestran que Kike ha hablado infinidad de veces con el policía y hay varías fotos de ellos juntos. Algunas incluso que él mismo ha publicado en sus redes sociales. "Se siente acorralado y en tensión y es normal aunque aparentemente intente hacer ver lo contrario. Kike siempre ha sido un luchador con respecto a su profesión. De siempre ha querido triunfar, ser famoso, destacar y, en cierto modo, lo ha conseguido pero no como él hubiera querido", nos dice una persona que le conoce bien. Y añade: "De hecho, ser el novio oculto de Terelu le mataba y no respiró hasta que ella le reconoció en un Deluxe".
De ese interés por destacar se desprende la venta de la exclusiva de su boda con Raquel Abad, ex concursante de Gran Hermano 7. Hasta se rumorea que va a quitar los móviles, como si fuera Belén Esteban, que hizo lo mismo para que no hubiera filtraciones. Calleja dice que lo hace para que sus invitados, muchos de ellos, famosos, estén cómodos. Pero no sería extraño que también estuviera preocupado porque le rompan la exclusiva por la que ha conseguido en torno a 20.000 euros.

Su ex novia Terelu, en la boda
Un buen pellizco dado que tienen que posar Terelu Campos, que tendrá gran protagonismo en el evento, su hermana Carmen Borrego, Alejandra Rubio y, por supuesto, muchos de sus compañeros de Sálvame, como María Patiño, Gema López, Chelo García Cortés y hasta la mismísima Belén Esteban. Por cierto, que la princesa de los gazpachos espera estar más recuperada para ese día de su rotura de tibia y peroné. Tampoco faltará Gustavo González, el paparazzi que aparece como el más salpicado por la operación Deluxe.
"A Kike le preocupa que su implicación en esta red de espionaje de famosos pueda afectar negativamente a la exclusiva. Hasta ahora ha sabido mantenerse al margen, pero sabe que, según se acerque su boda, estará en el centro de la información y es probable que empiecen a salir cosas suyas relacionadas con este caso", nos apuntan.