Los aromas salinos y su panorama sobre la bahía, la isla de Santa Clara y Monte Igueldo anticipan el encuentro con la inspiración y el oficio de Mikel Santamaría.
Dice el chef que a veces tiene la impresión de competir con el paisaje y la responsabilidad de transmitir en el plato las mismas sensaciones que producen sus vistas. Está situado al borde del puerto, con la playa de La Concha enfrente y el primer Aquarium de peces que se creo en España debajo. Mikel pertenece a una familia hostelera de Azpeitia muy acreditada ante la parrilla. Junto a su hermano Jesús encabezó en los bares Aloñamendi y Oñaz de San Sebastián un movimiento paralelo al de la nueva cocina vasca que renovó el pintxo donostiarra e implantó la cocina vasca en miniatura, lo que originó los célebres menús largos y estrechos de la cocina de autor. Una tendencia que, por cierto, no ejerce aquí, pues sus platos ensanchan las dosis.
Dos degustaciones
En sus dos formatos de menú degustación se observa un riguroso compromiso estacional de cuatro platos y postre que recrea la tradición culinaria vasca con audacia y sutileza propia. Es el caso de la gran tajada de merluza de anzuelo a la plancha, envuelta en una costrada a base de fondo de moluscos y maíz molido con una base de aguacate que todo lo armoniza. Consolida con él la más estupenda de las innovaciones recientes que hayamos catado con el pescado predilecto de Donostia. El rape negro a la brasa, con su refrito tradicional, es puro producto excelso; las iniciales kokotxas rebozadas o la sopa donostiarra de pescado y marisco, dos colosales clásicos de la casa y el pichón en su propio jugo, toda una respuesta al esmero y punto que exigen los asados de aves chicas, sin fatiga elaboradora alguna. La torrija de pan de leche o la combinación repostera del chocolate y la frambuesa son sus postres más certeros.
La dirección de sala de Santi garantiza secuencia puntual y compostura profesional, mientras que la extensa bodega, con su espectacular vinoteca, es otra buena razón para acudir. Bokado depara una espléndida terraza, un desahogado comedor y un reservado en lo alto, lugar predilecto de Bruce Springsteen –cuando no los túneles de aquarium–, siempre que visita San Sebastián. Bokado se caracteriza por el alto índice de repetición de su clientela local y es el lugar donde cada año el Festival de Cine celebra su cena clausura.
Bokado Mikel Santamaría
Plaza de Jacques Cousteau, 1
Donostia-San Sebastián
Tel.: 943 43 18 42
Cerrado lunes, martes noche y domingo noche
Menús degustación: 57€ y 6?8€.
Maridaje opcional: 12€ y amplia vinoteca
Página web: www.bokadomikelsantamaria.com