Una exposición en el Museo Cristóbal Balenciaga desvela los pequeños secretos invisibles de las prendas del modisto y que sostienen las formas exteriores características de las icónicas –y escultóricas– prendas del maestro de la alta costura.
El Museo Cristóbal Balenciga de explora una nueva perspectiva de su obra –"nunca antes transitada", según fuentes del museo–, centrada en lo que hace reconocible a "un Balenciaga", en la exposición 'Balenciaga carácter' que se expone hasta el 1 de marzo de 2023.
¿Qué es "un Balenciaga"? ¿Qué lo distingue? ¿Cómo se reconoce? ¿Qué le confiere su sello inconfundible? Desde las siluetas historicistas de finales de los años 30, hasta las formas más abstractas de los 60, pasando por las líneas icónicas de los años 50, las formas y volúmenes creados por Cristóbal Balenciaga son las principales señas de identidad de su auténtica "arquitectura de la alta costura", cuyas piezas se conservan y exhiben como las obras de un escultor.
En el contexto del 50 aniversario de la muerte de Balenciaga, que se cumple este 2022, el Museo Cristóbal Balenciaga, en Getaria (Guipúzcoa) exhibe una colección de 90 piezas repartidas en cinco salas en las que disecciona siluetas, volúmenes, tejidos y bordados, con el objetivo de descubrir el mundo interior, muchas veces oculto, que el corte, la técnica y los acabados de alta costura hacen posible. Una oportunidad única para entender qué es y cómo es un Balenciaga.

Mundo interior
Desvelar y compartir esos detalles que pasan desapercibidos a la vista pero que confieren la categoría de únicas –y reconocibles– a las piezas del modisto, a quien sus colegas de profesión –Dior, Chanel o Givenchy– consideraban el "Maestro" de la alta costura, es el objetivo de la muestra, comisariada por Igor Uria, director de Colecciones del Museo Cristóbal Balenciaga.
Etiquetas, enaguas, corpiños, almohadillas, pesos, forros, dobladillos, botonaduras y bolsillos forman parte de un mundo interior que imprime carácter, pequeños secretos invisibles de las prendas, que ahora revelan esta exposición, y que sostiene las formas exteriores características de Balenciaga.
Durante cinco décadas de trayectoria profesional, Balenciaga dirigió sus casas de alta costura en España –en San Sebastián (1917), Madrid (1933) y Barcelona (1935)– y Francia –París (1937)– e hizo de su nombre un sinónimo de elegancia, vanguardia, belleza y atemporalidad. En su obra, profusa en volúmenes improbables y tejidos llevados al extremo de sus posibilidades, destaca el trabajo minucioso de cada ojal, los suntuosos bordados, la precisión en cada manga y el mínimo de costuras en el corte.

'La elegancia del sombrero'
El museo del modisto, ubicado en Getaria (Guipúzcoa) exhibe las últimas semanas de la muestra 'La elegancia del sombrero', la exposición conjunta de las colecciones de sombreros del Museo Cristóbal Balenciaga y del Museu del Disseny de Barcelona.
Comisariada por Igor Uria y Sylvia Ventosa, expone 87 sombreros y tocados frutos de la obra del modisto hasta el 8 de mayo.