Tener una dieta saludable ayuda a reducir los riesgos de las enfermedades no transmisibles, como la diabetes, el cáncer, las cardiopatías o los accidentes cerebrovasculares, según señala la Organización Mundial de la Salud. En este sentido, el apio es un alimento fundamental para el organismo porque tiene multitud de beneficios.
Se trata de una planta de la familia de las umbelíferas o apiáceas, el mismo al que pertenecen el perejil, el hinojo o la zanahoria. De sabor intenso y aromático, se encuentra como planta silvestre en lugares húmedos y se cultiva en multitud de lugares del mundo, ya que no es exigente en suelos.
¿Con qué cocinar el apio?
Esta hortaliza de invierno se puede encontrar en el mercado en dos variedades: la blanca, que tiene un sabor más suave, y la verde, mucho más refrescante. ¿Qué le va bien el apio? Pues combina perfecto en arroces, caldos, purés, guisos... y también marida con la pasta, los garbanzos y otras verduras como la calabaza, los pepinos, los nabos, las patatas o los puerros.
¿Cuáles son las propiedades del apio?
El apio se considera un alimento regulador de la dieta, ya que su 92% de su peso es agua y su aporte calórico es muy bajo, con menos de 15 kcal. por cada 100 gramos. El apio tiene vitaminas del grupo B y vitamina K, y es muy rico en ácido fólico, mientras que los minerales con mayor presencia en su composición son el potasio y el magnesio, además de calcio, hierro y sodio.
De ahí que destaque más por sus propiedades saciantes y dietéticas que por su contenidos en macronutrientes. Otras propiedades de esta hortaliza son sedantes, digestivas, depurativas, regeneradores de la sangre, antiinfecciosas y cicatrizantes. También ayuda a formar el esmalte dentario, eliminar el exceso de ácido úrico y de cálculos renales, mejorar la memoria y luchar contra las enfermedades hepáticas.
¿Para qué se usa el apio?
Por todas estas propiedades, el apio se puede usar como diurético y depurativo; contra la diabetes; para bajar de peso; como antinflamatorio; como antioxidante para el colesterol; para los problemas digestivos, como por ejemplo la inapetencia, al igual que los problemas que pueden surgir en la piel como la psoriasis o el vitíligo.
¿Cuáles son los beneficios del apio?
- Diurético y depurativo: el potasio, sodio y apiol estimula la depuración del organismo y elimina el ácido úrico.
- Cardiosaludable: la apigenina sirve para prevenir la hipertensión arterual y otras enfermedades cardiovasculares.
- Ayuda a perder peso: su alta concentración en fibra y agua hace que el estómago se sacie.
- Digestivo: como es rico en fibra favorece el tránsito intestinal, previene el estreñimiento y reduce la acidez.
- Ayuda a conciliar el sueño: por sus efectos sedantes. Un remedio casero para conseguir dormir es tomar por la noche un zumo de apio con miel.
- Ayuda a regular la menstruación y alivia los síntomas de la menopausia: por la vitamina C y ácido fólico.
¿Cuándo no tomar apio?
Pese a que el apio cuenta con multitud de propiedades y beneficios como ya hemos visto, esta hortaliza no siempre resulta conveniente. Se recomienda no consumir en caso de tener afecciones renales agudas o cistitis, y durante el embarazo. Hay quien puede sufrir una reacción alérgica en forma de escozor en el paladar, la lengua, los labios, rinoconjuntivitis o tos.