De muy buen humor, con muchas ganas de volver a subir a su Bribón 500 y de navegar en el mar. Con una gorra, chaleco náutico y camiseta blanca básica de manga larga, don Juan Carlos ha embarcado en torno a las 11:00 de esta mañana del lunes 4 de septiembre. Desde el día 1 se encuentra en la isla británica de Wight, cita regatista mundial. Le acompaña su hija Elena, que está muy unida a él.
Arranca el campeonato Mundial de regatas de Wight. Día muy soleado en la costa sur inglesa, frente a la ciudad de Southampton. Este lunes 4 se celebra la primera regata de la competición y el rey emérito ha sido muy puntual.
En el pantalán del puerto ha comentado que hay muy buen mar y "muy buenas condiciones para salir". Ha hablado para los micrófonos de El Programa del verano, de Telecinco, desde donde han tratado de que pronunciara alguna palabra sobre su vuelta a España y, en concreto, sobre su regreso a Galicia. La última vez que visitó Sanxenxo deslizó que pensaba regresar "muchas veces".
En esta ocasión se ha mostrado esquivo y ha comentado que hoy "es un día para hablar de regatas". Más escueto que el pasado viernes, cuando de forma espontánea lanzó uno de los titulares más esperados. Los reporteros le preguntaron por su vuelta a nuestro país con el deseo de quedarse y el padre de Felipe VI dijo: "Seguro".
El campeonato del mundo de vela de esta emblemática isla se celebra entre el 4 y 9 de septiembre. El Rey emérito, de 85 años, ha ganado en dos ocasiones este título. Intentará revalidar su título.