El emérito ha aterrizado este jueves en la isla de Wight para participar en el Campeonato del Mundo de barcos de 6 metros, que se disputa en esta costa británica desde este jueves 31 de agosto al 8 de setiembre. No lo ha hecho solo: a su lado su gran amigo Pedro Campos (presidente del Real Club Náutico de Sanxenxo) y su hija, la infanta Elena.
La mayor de los hermanos se ha convertido en la mejor escolta de su padre, al que acompaña prácticamente cada vez que sale de Abu Dabi. La última, el pasado mes de agosto en Sanxenxo, donde don Juan Carlos y el resto de la tripulación del Bribón se alzaron con la Copa. Entonces, doña Elena se animó y participó también en las regatas a bordo del velero 'Alibabá II' que, capitaneado por Miguel Lago, logró la segunda posición.
Se desconoce si la primogénita de doña Sofía ha acudido a Wight en calidad de participante o solo de acompañante, pero sí que este jueves se ha convertido en una turista más paseando por la isla en compañía de una amiga. La infanta se ha resguardado de la lluvia con gorra, chubasquero y paraguas sin perder el ánimo, según Y ahora Sonsoles.
Si la climatología lo permite, este viernes arrancan los entrenamientos y veremos a don Juan Carlos en el puerto, donde ha quedado para navegar con Pedro Campos y el resto del equipo. El padre del rey Felipe se ha preparado a conciencia para la cita con una estricta dieta supervisada por su médico y ejercicios. Ha adelgazado 15 kilos y ha logrado reducir los problemas de movilidad que arrastra desde hace años. Además, el Bribón se ha adaptado para su comodidad con un asiento recubierto de piel y diseño en forma de V.
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