En las puertas de Catedral Metropolitana de Atenas, se ha evitado la sincronía de Felipe VI, doña Letizia, los Reyes eméritos y las infantas. No han coincidido, no hay foto. Los Reyes de España han llegado a la misa funeral de Constantino de Grecia a las 11:07 (hora local), cuando acababan de repicar las campanas de la seo. El resto de la familia real ya ocupaba sus bancos, dispuestos a la derecha del altar. Doña Letizia ha subido las escaleras agarrada del brazo izquierdo de su marido.

La reina, que ha lucido la perla Peregrina II en la solapa, ha escogido un vestido abrigo de color negro entallado en la cintura. El monarca, con corbata negra en señal de duelo, ha llevado el Toisón de Oro, la máxima condecoración.

Pablo, hijo de Constantino, ha recibido a don felipe con un gran abrazo, cálido y de condolencias. Pablo y Felipe, primos y amigos íntimos desde sus años de juventud, se tienen mucho cariño. (Fueron compañeros en la Universidad de Georgetown, en Washington, en 1995).
Los Reyes de España han entrado en la catedral con los brazos entrecruzados por la espalda. Por su condición de jefatura del Estado, han ocupado los bancos de la izquierda.
Misa funeral ni de Estado ni oficial
Formato reducido, de carácter privado y no oficial. Así ha sido el homenaje, discreto y medido, que ha recibido Constantino de Grecia. Nada de pompas fúnebres ni grandes tributos. La capilla ardiente con sus restos mortales ha permanecido abierta al público desde la madrugada de este lunes 16 en la pequeña Iglesia de San Eleuterio (Agios Eleftherios), que se encuentra justo al lado de la Catedral de la Anunciación de Santa María, también llamada Metropolitana de Atenas. Allí, en la seo, ha tenido lugar la misa funeral, ofrecida por el arzobispo metropolitano de la Iglesia Ortodoxa de Grecia, Jerónimo de Teba y Livadia.
El protocolo evitó la foto de los cuatro de reyes juntos como sucedió en Londres
Felipe VI y Letizia han brindado su último adiós al ex rey, cuyo féretro aparecía cubierto con la bandera griega y con una gran corona de flores blancas. A la izquierda del ataúd se encontraban los jefes de Estado. Entre ellos, los reyes de Bélgica y Holanda, Felipe y Guillermo.


Como se ve en la imagen inferior, a un lado siguió la misa la familia de Felipe VI, sus hermanas, sus padres y su tía Irene; y al otro lado del altar, donde se hallaba el féretro, ocupaban su asiento los Reyes de España.

Después de la misa, el ex monarca ha recibido sepultura en la que fuera la finca real de Tatoi, en las afueras de Atenas, donde yacen sus padres, Pablo y Federica de Grecia. Se trata de la antigua residencia de verano de la monarquía helena. Está previsto un entierro privado en el cementerio de este palacio, que fue nacionalizado tras el Golpe de los Coroneles, en 1967. El entonces monarca y su mujer se exiliaron. La casa donde se crió doña Sofía y sus hermanos fue objeto de una larga disputa entre el Gobierno griego y Constantino, que finalmente se resolvió con una compensación económica para la antigua familia real. Para la inhumación de Constantino se han llevado a cabo unas tareas de limpieza del camposanto.
Relacionados
- Don Juan Carlos y doña Sofía, arropados por sus hijas y nietos en el funeral de Constantino: no coinciden con Felipe VI y Letizia en la entrada
- Los Reyes Don Felipe y Doña Letizia, recibidos entre aplausos a su llegada a Atenas
- Letizia y Marie-Chantal entierran en Atenas las polémicas y rumores sobre su mala relación
- Felipe y Letizia aterrizan en Atenas para el funeral de Constantino: el dolor reúne a los Borbones