Poco queda de aquella imagen tímida y cabizbaja de Victoria Federica. La sobrina de Felipe VI ahora posa en bikini, aparece en portadas de revistas y reina en cada photocall de las fiestas más glamurosas a las que acude. Vic es influencer, muy a su pesar de su madre.
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Doña Elena, como le gusta que le llamen a la infanta, detesta la excesiva exposición mediática de su hija y parece que ha llegado a un punto en el que prefiere la distancia. Según cuentan desde La Razón, madre e hija no se hablan.
Como ya adelantamos en Informalia, este asunto también ha hecho que la relación de la hermana de la infanta Cristina con su exmarido, Jaime de Marichalar, sea cada vez peor. El ex duque de Lugo es ahora la mano derecha de su hija en su carrera de creadora de tendencias y eso no le ha sentado bien.
Prueba de ello lo que contó este portal el pasado 23 de septiembre: el incómodo encuentro que protagonizaron en el cumpleaños de Ira de Furstenberg en el palacio de Liria. Se ignoraron totalmente el uno al otro. No hubo ni un simple saludo.
Pero parece que Vic no está muy preocupada por cómo se llevan sus padres. Su cabeza está en otra cosa: su nuevo amor secreto. Aunque los rumores de una posible relación de la it girl con el torero Roca Rey se han ido haciendo más fuertes estas semanas, lo cierto es que otras fuentes aseguran que en la vida de la joven hay otro chico.
El joven "es alguien de la sociedad madrileña, pero que no es del mundo del famoseo ni de los medios de comunicación. Es de un entorno parecido al de Victoria", contó Beatriz Cortázar el pasado fin de semana en Fiesta. Explicó que los dos han logrado pasar desapercibidos porque "han sido muy prudentes y no van a ningún sitio juntos". Por el corazón de Victoria Federica han pasado otros chicos como el torero Gonzalo Caballero y el DJ Jorge Bárcenas, con quien rompió a mediados del año pasado después de tres años juntos.
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