Inspiración Hollywood, estilo cosmopolita y puro glamour. Un look muy exquisito y muy escogido. Es la ecuación que sigue doña Letizia para componer su conjunto pre ceremonia de premios. Y este año ha mantenido ese guion.

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Acompaña el tiempo cálido y primaveral en este escenario de Oviedo de Premios Princesa de Asturias. El primer acto oficial que presiden los Reyes en la semana de los galardones levanta una expectación altísima. Supone el regreso de Leonor a España y su primera reaparición en un evento institucional. Para este concierto de bienvenida, en el Auditorio Príncipe Felipe, doña Letizia siempre prepara un look muy cinematográfico. Sofisticado y sutil. Siempre nos deja un detalle. Un hilo del que tirar. Aquel corpiño de The 2nd Skin Co cubierto de plumas que hizo historia en su vestidor o el vestido gris perla, también con un largo detalle de plumas. Este año no iba a ser menos. Su opción ha sido estrenar. Esta es una noche brillante y su conjunto también es para eso. Para brillar.

La reina, que iba detrás del rey en la línea del saludo, ha sorprendido otra vez con un vestido joya entallado de color negro. Un diseño de Teresa Helbig con el protagonismo absoluto del cuello halter, con tirante de gargantilla, que dejaba lucir su espalda de dorsales y escápulas fibrosas. Una espalda fit. 

Completaba el look con salones destalonados de Carolina Herrera y cartera de Magrit a juego.

Tras el photocall, los Reyes y sus hijas han subido las escaleras del vestíbulo. Letizia se ha agarrado del brazo izquierdo de su marido.

Detrás, Sofía nos ha saludado con la mirada. Su hermana Leonor, con un impecable traje de chaqueta rosa, ha lucido unos salones de tacón fino. La princesa está muy mayor. Va a cumplir 17.

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