Tras el fallecimiento de Isabel II, el recién proclamado Carlos III celebrará su coronación la primavera del próximo año 2023 y los preparativos de la ceremonia ya han empezado. Sin embargo, el monarca pretende que sea muy distinta a las que ya se han realizado.

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Todavía no hay confirmación oficial de la fecha. Se especuló que podría ser el 3 de junio, pero un portavoz de Palacio lo desmintió. No obstante, Daily Mail recoge los primeros cambios:

-La ceremonia de coronación durará menos tiempo, de más de tres horas pasará a poco más de una hora.

-La lista de invitados a la ceremonia se reducirá probablemente de 8.000 a 2.000.

-Se ha debatido sobre un código de vestimenta más relajado. A los diplomáticos y otros invitados masculinos a la coronación de 1953 se les indicó que debían llevar "pantalones hasta la rodilla", mientras que a las mujeres se les aconsejó que llevaran tocados, preferiblemente tiaras. 

-Es probable que las sillas de terciopelo hechas especialmente para la coronación de 1953 sean sustituidas por asientos estándar. 

-Para ahorrar tiempo, se suprimirán antiguos y largos rituales, como la entrega de lingotes de oro al monarca.

-Habrá más diversidad religiosa y cultural. 

-Es probable que el príncipe Guillermo desempeñe un papel importante en la planificación de la ceremonia.

-La carroza de Estado de oro de 1762, que fue renovada para el Jubileo de Platino de la reina, sí que volverá a formar parte de la procesión de la coronación.

Se entiende que con estas decisiones el marido de Camilla Parker-Bowles quiere que su coronación marque el tono de una monarquía moderna, aunque conservando parte de la majestuosidad que asombró al mundo durante las ceremonias del funeral de su madre.

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