Un paseo romántico de Iñaki Urdangarin con su compañera de trabajo Ainhoa Armentia por una playa de Bidart dinamitó los 24 años de unión del ex duque y la infanta Cristina. Unas imágenes que causaron un inmenso revuelo mediático durante semanas en la tranquila Vitoria. Este 4 de octubre de 2022 el matrimonio habría cumplido 25 años. Las bodas de plata que no han llegado.

Durante este cuarto de siglo, la lealtad de Cristina a Iñaki ha sido inquebrantable, pese al caso Nòos, el destierro a Washington, la cárcel de Brieva (Ávila) y su 'inhabilitación' en Zarzuela. Cristina, por amor al ex jugador de balonmano, ha podido con todo. Se hizo más fuerte que nunca. Incluso, cuando Felipe VI le revocó el título de duquesa de Palma (regalo de su padre don Juan Carlos cuando se casó) y se hizo invisible en Casa Real. La infanta ha sido el pilar de su familia y ha vivido como una piña con sus hijos los años de prisión de Iñaki.

Ahora afronta un proceso de divorcio, que no tiene vuelta atrás. Se habló de un acercamiento entre ambos, pero no. Y parecía que el paseo de la mano de Iñaki y Ainhoa en enero apuntaba a una relación de poco recorrido, pero vistos esos besos y abrazos arenosos de la playa de Formentera y en aguas del Mediterráneo de hace unas semanas, abro los ojos. Veo tanta pasión como recorrido. También veo mucha playa en esta relación. Les gusta este escenario del mar, la arena y el amor.

El matrimonio Urdangarin-Borbón no funcionaba desde hace tiempo. Esto es así en el momento en el que saltan a los medios distintas imágenes del ex jugador de balonmano y su mejor amiga que datan del verano de 2021. Cuando la relación de Iñaki ve la luz, los medios presagian que la infanta era conocedora de esta aventura y que, incluso, fue el propio ex duque quien le habría comunicado la existencia de Ainhoa en su vida.

El comunicado de la ruptura

El 24 de enero de 2022, después de la tormenta mediática que causa la infidelidad de Iñaki a Cristina, los ex duques anuncian su ruptura y deciden "de común acuerdo, interrumpir su relación matrimonial". Subrayan que el compromiso con sus cuatro hijos "permanece intacto". En este anuncio se hace referencia explícita a que "es una decisión de ámbito privado". El matrimonio de los ex duques no iba bien por lo menos desde ese verano de 2021. Estaba roto en el ámbito privado, en el estrictamente familiar. Pero no en el ámbito público, que nos enteramos por una revista. Pero lo del ámbito privado para el ex duque es un concepto relajado, vistos los besos con Ainhoa hace unos días en Formentera.

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