Muchas voces han opinado sobre el mini vestido de Zara que llevó la reina Letizia hace unos días en Palma, en una noche de cena y shopping con sus hijas y su suegra, doña Sofía. Que si era muy corto, que si está a punto de cumplir 50 años... El relato no se sostiene, ni para criticarlo ni para alabarlo. La edad no tiene que ver con los centímetros de un vestido. Tiene más que ver con la actitud, con la libre elección y también con el contexto. Este jueves 10 de agosto Letizia ha repetido guion de estilo en su salida privada (no es un acto de la agenda) con el rey Felipe VI y sus hijas, también por el centro de la capital balear.

Durante el paseo sorpresa, don Felipe ha bromeado con su hija mayor. El Rey, con pantalones bermudas color caqui y polo, iba conjuntado con su mujer.

La Reina ha elegido (otra vez) lucir piernas bronceadas y ha recurrido a unos mini shorts, con cinturón a juego, que ha combinado con una camisa blanca de manga larga. La bolsa con el tejido de lenguas ya es un básico en sus complementos de verano, junto con las alpargatas planas. Letizia repite 'look corto' en una salida privada. El contexto es el que es: paseo familiar, Palma, mar y verano.  

A lo largo del recorrido, Letizia ha conversado con su hija Sofía, que lleva un mini vestido verde pistacho con detalle de hojas. La hija menor de los Reyes sonreía a su madre, mientras mostraba sus brackets transparentes, una ortodoncia muy habitual a sus 15 años.

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