El príncipe Guillermo ha asistido este lunes 25 de abril por la mañana al homenaje por el Día de Anzac en el Cenotafio de Londres, el monumento a los caídos en Whitehall. El Día de Anzac conmemora el aniversario del desembarco en Galípoli, en la Primera Guerra Mundial. Se ha unido a esta celebración Kate Middleton, que ha confiado todo su look al total white.

Se trata de un día para el recuerdo, que rinde tributo a la batalla de la Primera Gran Guerra en la que participaron las fuerzas australianas y neozelandesas. Después de depositar una corona de flores, los duques de Cambridge se han dirigido a la Abadía de Westminster. A estos actos también ha asistido el Alto Comisionado de Australia. 

Kate ha lucido una diadema blanca en tweed, de Jane Taylor, que recogía detrás con una cinta negra de raso. El tocado es un 'falso pillbox', uno de los sombreros favoritos de Jackie Kennedy, primera dama estadounidense, icono de moda y referente mundial de las tendencias de los años sesenta.  

La mujer de Guillermo ha combinado la diadema con un vestido-abrigo blanco nieve, entallado a la cintura y con una solapa pequeña, de la emblemática firma british Alexander McQueen. Estrenó este diseño en el bautizo de su hija Charlotte, en junio de 2015. Los salones son de Gianvito Rossi; y la cartera, de Jenny Packman. Kate, que ha elegido unos pendientes de perla en forma de gota de Diana de Gales, lucía la tradicional amapola roja, símbolo del recuerdo a los caídos en la contienda.

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