Juntos, abrazados, acompasados en el paso y mirándose a los ojos. Igual de románticos que en las fotos de la playa de Bidart, pero en otro escenario. Un bosque. El nuevo paseo de Iñaki Urdangarin y Ainhoa Armentia por un parque natural cercano a Vitoria es la escenificación de su historia de amor. Buscan ese momento íntimo, alejados de la gente y rodeados de naturaleza. Alejados también de ese tsunami mediático que supuso el descubrimiento de su relación. La narrativa visual del reportaje de Hola va acompañada también del relato. Todo muy bucólico. El ex duque y su amiga normalizan su relación.

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Iñaki Urdandarin ha pasado de ser el infiel, el traidor y el que engañó a su mujer, la infanta Cristina, con su compañera de trabajo, a ser un hombre nuevo. Un Iñaki que mira hacia el futuro. En ese recorrido le acompaña de la mano, Ainhoa.

La imagen del ex duque, haciendo senderismo en un entorno de naturaleza, en el parque natural de Garaio (cerca de Vitoria), relajado, libre de caminar abrazado a su novia, dista mucho de la tormenta que generó su infidelidad. También dista mucho de aquel Urdangarin, que entró en prisión en 2018 para cumplir una condena de cinco años y diez meses prisión por el caso Nóos. Ahora, con su régimen de libertad condicional, concedido el pasado marzo, el ex duque inicia una etapa distinta en su vida junto a su amiga.

Sus confesiones a Juanma Castaño, en Cope, el pasado marzo fueron una auténtica declaración de intenciones: el ex jugador de balonmano está en modo 'kilómetro 0', dispuesto a comenzar otra vez siguiendo sus nuevos sus mantras: "Miro para adelante", "la ilusión que tengo es la de volver a reinventarme" y "volver a arrancar". Con estas emociones reconstruye su vida profesional y personal.

En el plano profesional, se reinventa como coach en el Barcelona, donde ha recibido un curso de formación de entrenador; y en el personal, también se reinventa junto a Ainhoa. La que fuera compañera de trabajo en Imaz & Asociados se ha convertido en su gran apoyo en refugio. Ambos tienen que preparar sus respectivos acuerdos de divorcio. En el caso de Iñaki, se casó con la infanta en régimen de separación de bienes. La demanda de divorcio podría presentarse en Ginebra (Suiza), donde vive Cristina en un intento por mantener una mayor privacidad. La hija de los eméritos es la que se hace cargo de los cuatro hijos que tienen en común (Juan, Pablo, Miguel e Irene), como viene haciendo desde hace diez años, según Hola. En este proceso, la infanta desea mantenerse lejos de su marido. 

Cristina y Ainhoa: mismo estilo 'casual' y 'sporty'

Imposible pasar por alto la semejanza de estilo entre Ainhoa y Cristina. La infanta, en su vida privada, mantiene un estilo casual, cómodo y sencillo. En sus looks abundan los vaqueros, los pantalones tobilleros, las camisetas de algodón y las cazadoras. Siempre, colores lisos, desde el azul navy, al gris y negro. Le gusta mucho el estilo 'sporty', quizás influencia de su marido, ex deportista profesional. Ainhoa también comparte esa imagen casual: vaqueros, botas y zapatillas. Le gusta el formato oversize. Además, ambas lucen melenas lisas, de un tono rubio dorado.

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