La duquesa de Cambridge y Mary de Dinamarca mantuvieron un pulso de estilo en su encuentro en Copenhague durante la visita de Kate, en solitario, al país escandinavo. La británica deslumbró por su sonrisa espontánea y su sencillez. Analizamos sus trucos.
La esposa de Guillermo fue recibida en audiencia por la reina Margarita y Mary en el Palacio de Cristian IX el miércoles 23 de febrero. Después de la recepción, la nuera de la Reina compartió un almuerzo privado con la duquesa de Cambridge en el Palacio de Federico VIII. Ambas mostraron gran conexión y complicidad durante los actos. Después visitaron un centro de acogida para mujeres. Allí, asistieron a una presentación de la Fundación Mary, que atiende las necesidades de 2.000 niños y de sus madres.
Tanto Kate como Mary están muy comprometidas con los asuntos sociales que afectan a la infancia, la salud y las mujeres. Las dos son mujeres de su generación, trabajadoras y madres de familia numerosa. Ambas, también, son apasionadas de la moda eco sostenible. En su encuentro, Kate lució un impecable abrigo bicolor de Catherine Walker. Una firma que viste mucho a la nuera de Carlos de Inglaterra. El abrigo, de lana de color gris marengo, lleva un detalle de botones decorativos y solapa y puños en negro. Kate combinó este diseño, muy de su estilo, con unos salones negros.
La mujer de Federico de Dinamarca creó un conjunto en blanco y negro. Un binomio, que es tendencia esta temporada. Combinó un vestido básico con medias tupidas negras con un abrigo-levita en blanco nieve con cierre oculto. El abrigo, de tweed, lo firma Chanel.
El look ganador fue para Kate. Estas son las 4 claves de su conjunto estrella: primero, escogió diseño británico, gracias Catherine Walker & Co, una firma de alta costura experta en sastrería. Todo un clásico renovado. Además, acertó en los tres complementos: un minibolso de asa corta (tendencia máxima), los guantes de piel y las medias de cristal efecto nude (mejor que las medias tupidas opacas de Mary).
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