La familia al completo se reunió este fin de semana en la Ciudad Condal en su primer encuentro tras la publicación de las imágenes de Iñaki Urdangarin con su compañera de trabajo y el comunicado anunciando la "interrupción" del matrimonio entre los ex duques de Palma. La infanta Cristina llegó el viernes en avión y acompañada por su hija Irene, de vacaciones de invierno en su colegio, mientras que Iñaki Urdangarin lo hizo en coche y solo.
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Allí les esperaban ya Juan, que vive en Madrid, y Pablo, que reside en Barcelona. Esta vez, el joven no quiso hablar con los reporteros al ser preguntado por el reencuentro familiar: "Prefiero no comentar". Según Hola, la infanta e Irene se instalaron en Pedralbes, su antiguo barrio, mientras que Iñaki pernoctó en la casa de su hermana Ana. La discreción en los movimientos de todos ellos fue absoluta y los escoltas les ayudaron a despistar a los pocos fotógrafos que trataban de obtener la imagen más deseada: la familia, reunida de nuevo. No fue posible.

El lunes, Día de los Enamorados, ni Cristina ni Iñaki se personaron en sus lugares de trabajo. Seguían en Barcelona, resolviendo asuntos y estudiando sus siguientes pasos. ¿Y una reconciliación, tal vez? La periodista barcelonesa, Laura Fa, ha asegurado que la intención de Urdangarin desde hace unas semanas es clara: volver con su mujer. "Lo que él quiere es volver con la infanta. Su argumento es que de lo mal que estaba habría cometido un error. Admite que se ha equivocado y está arrepentido", ha dicho.

Lo cierto es que Urdangarin no ha vuelto a ver a Ainhoa Armentia desde que las imágenes de la pareja paseando por una playa cercana a Bidart vieran la luz y dieran pie al escándalo. El abogado del ex deportista, Mario Pascual Vives, dejó entrever la posibilidad de reconciliación con la hija del rey Juan Carlos: "Es un tiempo que ellos se han dado para reflexionar. No hay ningún documento firmado con su separación y el matrimonio sigue vigente jurídicamente. Es un impass, es un tema que han acordado ellos dos, no es un cese, ni separación, ni divorcio sino un tiempo que ellos se dan, cada uno reflexionará y sentirá". Su propio hijo, Pablo, también habló sobre ello: "Yo creo que sí podrían reconciliarse. Sería lo normal".
