Marta Gayá, la mallorquina que fue el gran amor de Juan Carlos I, o el empresario José Marías López de Letona no son las únicas amistades que visitan al antiguo Jefe del Estado en su "exilio" de Emiratos Árabes Unidos. También, Abdul Rahman El Assir: esta es la historia de su amistad con el emérito.
La noticia de que el hispano-libanés y mercader de armas Abdul Rahman El Assir también le hace compañía al anterior rey de España en Abu Dhabi, publicada este lunes por el diario El País, ha levantado un nuevo tsunami mediático.
El padre de Felipe VI es amigo y compañero de cacerías desde hace más de 30 años de este comisionista sobre el que pivotan negocios millonarios y oscuros, con países de mala reputación política, metidos en conflictos bélicos.
El libanés, con nacionalidad española, tiene una orden de búsqueda y captura internacional, por fraude fiscal, ocultar sus ganancias a la Agencia Tributaria y otros delitos de la misma índole, cometidos en Francia y Suiza. Solo en España, la Justicia pide para él 8 años de cárcel y 90 millones de euros entre impagos y sanciones.
Nunca ha comparecido en las distintas citas que ha ido teniendo en los tribunales españoles para explicar los delitos de que le acusaban. Estaba desaparecido hasta que el citado periódico lo ha situado nada menos que junto a Juan Carlos en Abu Dhabi.
Este personaje, con una gran historia, supuestamente delictiva, nunca ha sido muy visible en España, donde sin embargo ha vivido casi 40 años. Siempre ha evitado aparecer en la prensa de sociedad, a pesar de que tanto él como su familia han llevado una intensa y lujosa vida mundana en sus distintas residencias de Puerta de Hierro, Sotogrande, Gstaad o Marbella, aunque sus vacaciones más discretas, estaban mucho más lejos: en la isla caribeña de Moustique.
El Assir supo rodearse de gente con fortuna y poder. Su desembarco en España se hizo gracias a su cuñado Adnam Kashoggi, el magnate saudí traficante de armas, que atrajo a los jeques árabes y sus petrodólares a Marbella. Las conexiones de El Assir con el gran mundo de la sociedad internacional, iban mucho más allá de las caras famosas y los bronceados millonarios de la Costa del Sol.
Su esposa Samira, hermana de Kashoggi, había estado casada anteriormente con Al Fayed, el magnate egipcio que se hizo el dueño de los famosos almacenes Harrod`s de Londres. Uno de los hijos del matrimonio, era Dodi Al Fayed, el último y trágico amor de Diana de Gales, que falleció junto a la princesa en el accidente de París.
El Assir dejó a Samira Kashoggi cuando se enamoró de María Fernández Longoria, secretaria en Alkántara, la empresa española de El Assir. María, hija de un embajador de España en Egipto, introdujo a su flamante marido en círculos sociales españoles a los que no se llega únicamente con dinero. No sólo el rey Juan Carlos llegó a ser uno de sus mejores amigos en nuestro país. El Assir también alternaba con Felipe González, otros socialistas importantes y todo aquel que tuviera poder e influencias.
José María Aznar le invitó al ya mítico enlace de su hija Ana Aznar con Alejandro Agag, la famosa boda de El Escorial, paradigma del poder político, las grandes fortunas y cita de los empresarios que manejaban la economía del país y de Europa.
El rey Juan Carlos también le invitó a la boda del príncipe Felipe y Letizia Ortiz, pero no hay forma de encontrar una foto del comerciante de armas en la ceremonia.

En semejante entorno y circunstancias, los tres hijos de El Assir y María Fernández Longoria han crecido y se han tratado con la mejor sociedad española e internacional.
Su hija mayor, Alia, celebró en 2016 en Gstaad, su fastuoso enlace con el abogado Hugo Linares. Tres días de fiesta, 400 asistentes y un avión privado fletado en Madrid por el padre de la novia, para que invitados de la familia como Ana Boyer, Sara Verdasco, Tamara Falcó, Jacobo Fitz-James Stuart, Ana Aznar y Alejandro Agag, viajaran a la localidad suiza cómodamente.
Khali, la hija mediana, hace tiempo que mantiene relaciones con Juan José Franco Suelves (foto inferior), bisnieto del dictador, hijo de Francis Franco y de su primera esposa María Suelves. El Assir y Francis han compartido muchas cacerías dentro y fuera de España, ahora es muy probable que acaben siendo consuegros.

El hijo menor, Adil, fue novio durante algún tiempo, de Mencía Fitz-James Stuart, hija de Isabel Sartorius y de quien fuera su amor tras salir con Felipe de Borbón, Javier Soto (que cambió el orden de sus apellidos al heredar la fortuna de un tío soltero, pariente de la duquesa de Alba).
El traficante libanés se refugia en los países del Golfo Pérsico, huyendo de la Justicia, pero sus hijos siguen ahí, como parte de la alta sociedad y la auténtica jet set internacional, que no entiende de antecedentes penales y otras pequeñeces.
Relacionados
- Marta Gayá visita a don Juan Carlos en Abu Dabi con frecuencia: recuperan las fotos requisadas a los paparazzi
- El rey Juan Carlos da negativo en Covid-19 tras su contacto con Rafa Nadal
- El rey Juan Carlos se someterá a una prueba PCR tras el positivo en Covid de Rafa Nadal
- Rafa Nadal, positivo por COVID tras compartir mesa sin mascarilla con don Juan Carlos en Abu Dabi